La cúrcuma es el ingrediente que le da a esta deliciosa crema de patata, zanahoria, apio, coliflor y cebolla su apetecible color dorado. Originaria del sur de la India e Indonesia, esta especia tiene un aroma parecido al de la pimienta, un sabor cálido con notas amargas y muchísimas propiedades; estimula el sistema inmune, mejora la digestión, regula la flora intestinal, combate gripes y resfriados, limpia el hígado y alivia inflamaciones. En la receta que te proponemos hoy, le sacamos el máximo partido a la cúrcuma y la usamos para especiar la crema de hortalizas y también para tostar los garbanzos que la acompañan. Como toque final, la rematamos con unas lonchas crujientes de jamón para crear un juego de distintas texturas muy interesante. Si quieres empezar a incorporar la cúrcuma en tu dieta habitual, anímate a probar el arroz basmati con pasas y piñones , el pollo al curry “tikka masala” , el salmón al curry y langostinos y el té verde a la cúrcuma con frutos secos . Variantes de la “golden soup” Si eliminas el crujiente de jamón, la receta será vegana. El perejil usado en la decoración le da a la receta un toque fresco. Se puede reemplazar por perifollo, cebollino, estragón, orégano, etc. Para darle un toque picante, rehoga las verduras con pizcas de cayena molida.