Igual no te sonaba esta denominación para estos apetitosos palitos de bacalao rebozados acompañados de tiritas o dados de pimientos morrón, que se sirven fríos como tapa en muchos de los bares de Madrid. También se estilan en algunos rincones de Andalucía. Y ¿de dónde viene ese nombre tan curioso? Pues parece ser que llamarles pavías a las frituras de bacalao se podría deber a que su color recuerda al del uniforme de los húsares de los tercios españoles que combatieron en la Batalla de Pavía. Y la decoración con pimientos rojos se usaba para simular los galones de los soldados. Esta es solo una de las teorías, pero sea cual sea su origen (algunos lo asignan a Casa Labra, la taberna de la calle de Tetuán en Madrid) lo cierto es que es un bocadito de bacalao delicioso . Si eres fan de los bocados con bacalao, no pueden faltar en tus menús los buñuelos , que también puedes enriquecer con aceitunas o prepararlos al horno . Consejos para tus pavías: Lo más típico es presentarlo con las tiras de pimiento rojo enteras. Si quieres que tengan un sabor más auténtico, prepara los pimientos asados en el horno. Si quieres que el azafrán dé más sabor, tuéstalo ligeramente antes en la sartén. En los bares se suele tomar frío, pero calentito también está riquísimo.