Ni carne picada ni bacalao: estos pimientos del piquillo rellenos son perfectos para Navidad (y el resto del año)

Esta receta de tradición navarra aúna los platos de mar y montaña. Su relleno es un espectáculo para los cinco sentidos

Óscar Sanz
Óscar Sanz
Cocinero

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Víctor Fernández - Cocina Fácil

Pimientos del piquillo rellenos de langostinos y setas
Víctor Fernández - Cocina Fácil
4 personas
40 min

4

(115 votos)

Dieta:

Mediterránea

Tipo Plato:

Primeros platos y entrantes

Segundos platos y platos principales

Precio:

€ €

Dificultad:

Media

Sin huevo

En Cocina Fácil somos unos auténticos fans de los pimientos del Piquillo, un ingrediente todoterreno que, en nuestra opinión, siempre hay que tener en la despensa porque te puede sacar de más de un apuro.

Hay muchas maneras diferentes de cocinar los pimientos del Piquillo. A nosotros nos encantan solos, salteados con un poco de ajo para el aperitivo o como acompañamiento de carnes y pescados, como los pimientos del Piquillo en su pilpil, típicos de Navarra. También nos gustan para dar sabor a salsas, como en estos lomos de salmón

Pero, sin duda, de la manera como más nos gustan son rellenos. Y hay tantas recetas de pimientos del Piquillo rellenos que a veces nos cuesta elegir una. Los tienes fríos y calientes, con carnes y con pescados (los más famosos son los rellenos de brandada de bacalao), o, como en el caso de nuestra receta de hoy, unos pimientos del Piquillo mar y montaña, rellenos con setas y langostinos.

La elaboración de la receta es muy fácil. Solo se trata de preparar una bechamel con puerro, setas y langostinos y rellenar con ella los pimientos en conserva. Luego, los regamos con una salsa facilísima a base de vino y caldo y los gratinamos con queso en el horno. El resultado está para chuparse los dedos, te lo garantizamos.

PIMIENTOS RELLENOS DE SETAS Y LANGOSTINOS

Ingredientes paraNi carne picada ni bacalao: estos pimientos del piquillo rellenos son perfectos para Navidad (y el resto del año)

  • 12 Pimientos Del Piquillo
  • 1 Puerro
  • 1 Chalota
  • 250 gramos de Setas
  • 250 gramos de Langostinos
  • 250 mililitros de Leche
  • Harina
  • Perejil picado
  • 1 copa de Vino Blanco
  • 1 vaso de Caldo
  • Queso Emmental rallado
  • Aceite
  • Sal
  • Pimienta

1. Trocea los langostinos

Pela los langostinos, retírales el intestino y trocéalos, cortando cada cola en 3 o 4 trozos. Limpia las setas, mejor con un paño húmedo y sin dejarlas en remojo para que no absorban agua excesiva, y pícalas con un cuchillo de cocina. Lava el puerro, retira la base de las raíces y la primera de las capas y pícalo también muy menudo.

1. Trocea los langostinos

2. Prepara la bechamel de marisco

En una sartén con un poco de aceite, rehoga el puerro picado hasta que esté blandito, 3 o 4 minutos. Añade entonces las setas picadas y salpimienta a tu gusto. A los 2 minutos, incorpora una cucharada de harina y remueve para que se dore. Añade la leche y cuece 8 minutos, sin dejar de remover. Incorpora los langostinos y cuece 2 minutos más. Retira la bechamel del fuego y déjala enfriar a temperatura ambiente.

2. Prepara la bechamel de marisco

3. Prepara la salsa

Aparte, pica y pocha la chalota en una sartén con un fondo de aceite, agrega una cucharada de harina, remueve y cocina 2 minutos para que no tenga sabor a crudo. Incorpora el perejil picado. Echa el vino, déjalo reducir para que se evapore el alcohol, removiendo, y por último añade el caldo y cuece 3 minutos.

4. Rellena los pimientos

Escurre los pimientos del Piquillo de su líquido de conservación. Rellénalos con la bechamel de marisco preparada, ponlos en una fuente apta para horno, riégalos con la salsa de perejil, espolvorea con queso rallado y gratina los pimientos bajo el grill del horno durante 5-7 minutos a 180º o hasta que veas que el queso se ha fundido y está ligeramente tostado.

4. Rellena los pimientos

¿Langostinos frescos o congelados?

La verdad es que cualquiera de las dos opciones son perfectamente válidas para esta receta, en la que los langostinos forman parte de un relleno.

Si los eliges congelados, primero deberás dejarlos descongelar. Ya sabes, mejor que lo hagas en la nevera, en un recipiente con una rejilla para que el agua que van soltando no quede en contacto con los langostinos.

Una vez descongelados, deberás pelar y limpiar los langostinos. Si tienes dudas sobre cómo se hace, mira el paso a paso en nuestro vídeo:

¿Qué setas son las mejores para esta receta?

En cuanto a las setas, puedes usar solo champiñones, o portobellos, o decantarte por una mezcla de setas de cultivo, que ya se venden limpias y preparadas para cocinar en la sección de refrigerados de la mayoría de supermercados.

Las setas también pueden ser congeladas o secas, fuera de temporada.

  • Si las eliges congeladas (puede ser uno de esos variados de setas que se comercializan en bolsas), tendrás que saltearlas primero en una sartén con un poco de aceite, directamente de la bolsa y sin descongelar, hasta que hayan perdido el agua que sueltan y estén tiernas.
  • Si las rehidratas, guarda el agua del remojo porque luego la puedes colar y añadirla a la salsa para darle un extra de sabor, sustituyendo una parte del caldo que se indica en la receta. 

Ingredientes para enriquecer tus pimientos del piquillo rellenos

  • Queso: además de gratinar los pimientos con queso, puedes agregar queso rallado o en cubos pequeños al relleno. Puedes usar queso manchego, queso de cabra o queso crema para aportar cremosidad y sabor. Con el calor del horno al gratinarlos, el queso se empezará a fundir y quedará muy apetitoso.
  • Jamón: añadir jamón serrano o jamón ibérico picado al relleno también es una opción deliciosa que puede proporcionar un toque salado y ahumado a tu receta.
  • Espinacas: las espinacas salteadas o cocidas pueden aportar frescura y un toque verde al relleno. Asegúrate de escurrirlas bien para evitar que el relleno quede demasiado húmedo.
  • Pimientos adicionales: puedes añadir pimientos asados, como pimientos rojos o amarillos, para complementar el sabor de los piquillos. O añadir un pimiento del Piquillo picado para potenciar su presencia en el plato.
  • Nueces o almendras: agregar frutos secos picados, como nueces o almendras, puede proporcionar un agradable crujido y un sabor característico.
  • Hierbas frescas: como perejil, cilantro, eneldo, romero... Las hierbas frescas darán un aire mediterráneo al plato.
  • Especias: experimenta con especias como pimentón, cayena, o incluso un toque de curry para darle un giro diferente al relleno.
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