Si te gusta cocinar y vivir de la forma más natural posible, seguro que has pensado muchas veces en preparar tus mermeladas caseras . Ya sea para tomarlas en el desayuno con unas tostadas recién hechas o como parte de tus postres , dándoles así un toque aún más casero al relleno de los pasteles o como topping de los lácteos. No pienses que es tarea difícil, todo lo contrario. Si ya tienes tus frambuesas , o recién cogidas del campo o fresquitas recién compradas, tienes que dejarlas macerar con azúcar toda la noche en la nevera, preferentemente. Si prefieres la de arándanos , mira nuestro artículo: Con qué servir la mermelada de frambuesa Tartas y dulces pasteles: agregar mermelada de frambuesa a pasteles, magdalenas o bollos les queda genial. Puedes rellenarlos o hacer capas de mermelada Yogur: mezclar mermelada de arándanos con yogur natural o griego puede ser una forma deliciosa de agregar dulzura a tu desayuno. Postres: utiliza la mermelada como topping para helados, púdines, flanes u otros postres lácteos para añadir un contraste de sabor. Acompañante para quesos: algunos tipos de quesos, especialmente los quesos frescos y suaves, pueden combinar muy bien con la mermelada de arándanos. Puedes servir ambos en una tabla de quesos para un aperitivo sabroso.