Manzanas con chocolate y nueces

Si quieres una forma sencilla y original de unir fruta y postre dulce, mira cómo preparar unas rodajas de manzana con chocolate fundido y nueces.

Aurora Gonzalo
Aurora Gonzalo

Periodista especializada en gastronomía

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Cocina Fácil / RBA / A.J.J. ESTUDI, S.C.P.
12 Unidades:
30 min

3

(34 votos)

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Baño maría

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Las manzanas con chocolate y nueces son un postre que une la frescura de la fruta con el sabor incomparable del chocolate. Además, el crujiente de los frutos secos le da un toque irresistible que convierte cada bocado en una delicia. Si buscas un postre fácil, rápido de preparar y que sorprenda a cuantos lo prueben, deja de buscar, esta receta de Cocina Fácil es todo lo que necesitas.

Hay dulces que, con pocos ingredientes y casi sin esfuerzo, logran un resultado espectacular. Estas rodajas de manzana bañadas en chocolate y decoradas con nueces y toffee son un claro exponente de este tipo de postres. Son ideales para una merienda especial, como colofón de una cena elegante o, por qué no, un capricho dulce para cualquier momento del día.

Te aseguro que este postre de chocolate y manzana siempre triunfa. Y no es cosa difícil porque, como dijo Skene Catling, "nueve de cada diez personas adoran el chocolate, la décima miente". Y si hablamos de manzanas, un famoso proverbio inglés señala: "Una manzana al día mantiene al médico en la lejanía". ¿Te animas a comprobarlo?

Ingredientes paraManzanas con chocolate y nueces

  • 4 Manzanas
  • 100 gramos de Nueces peladas
  • 150 gramos de Chocolate Negro fondant
  • 100 gramos de Salsa De Toffe

1. Prepara la bandeja

Forra una bandeja rectangular de paredes bajas con papel sulfurizado y reparte por encima, bastante separados entre sí, 10-12 palitos de madera de los que se utilizan para hacer polos de helado.

2. Turno para las manzanas

Lava las manzanas y sécalas. Pártelas luego por la mitad y descorazónalas. Córtala entonces en rodajas no demasiado gruesas y ensártalas en los palitos. Repela las nueces si es necesario y pícalas.

3. Vamos con el chocolate

Trocea el chocolate, fúndelo al baño maría y viértelo por encima de las manzanas. Decóralas con las nueces y con unos hilos de salsa de tofe, y deja que se enfríen antes de servir.

6. Deja enfriar y sirve

Coloca la bandeja en el frigorífico durante 15 minutos para que el chocolate se endurezca. Una vez frías, sirve y disfruta.

El truco

Antes de bañarlas en chocolate, sécalas bien con papel de cocina. La humedad de la manzana puede hacer que el chocolate no se adhiera correctamente. Si están bien secas, el chocolate quedará uniforme y con un acabado más bonito.

Ten por seguro que la combinación de manzana, chocolate negro y nueces es un acierto, pero también puedes adaptarla a tus gustos o a los de tus comensales. Aquí tienes algunas ideas que me encantan:

  • Chocolate blanco o con leche: Si prefieres un sabor más dulce, prueba con chocolate blanco o con leche en lugar del negro.
  • Otros frutos secos: En vez de nueces, puedes usar almendras, avellanas o pistachos.
  • Manzana caramelizada: Si buscas un acabado más sofisticado, antes de bañarlas en chocolate, pasa las rodajas de manzana por un poco de caramelo líquido y deja que se endurezca.

 

Estas manzanas con chocolate además de como postres también te sirven para una merienda divertida, para una fiesta infantil o incluso como un snack diferente. Su combinación de texturas y sabores las hace irresistibles para grandes y pequeños. Además, son una forma estupenda de incorporar la fruta en los postres sin renunciar al sabor.

Hacer este tipo de postres en casa tiene muchas ventajas. No solo puedes asegurarte de que los ingredientes sean de calidad, sino que también puedes ajustar las cantidades de azúcar y elegir ingredientes más saludables. Además, es una alternativa mucho más natural y casera que los dulces industriales.

Tienes que preparar estas manzanas con chocolate y nueces, con poquísimos ingredientes, en cuestión de minutos y poniendo tan solo un poquito de mimo de nuestra parte conseguimos un dulce sabroso, crujiente y sorprendente, de esos que siempre dejan buen recuerdo. ¡Ponte manos a la obra, tus invitados te lo van a agradecer!

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