Filloa, afilloa, filloga, freixó... Según la zona de Galicia, a este postre se le da un nombre u otro. Pero la preparación tradicional es la misma y se ha conservado a lo largo de los siglos. Hoy, nosotros les hemos querido dar un twist más actual: estas filloas rellenas de crema combinan la clásica textura de las originales y el delicado sabor de la crema pastelera. Aunque la receta tradicional manda preparar las filloas con caldo de carne y cocinarlas con la grasa del tocino, no es en absoluto necesario. Si las quieres más ligeras y menos potentes, el secreto está en utilizar leche en lugar de caldo y cocinarlas con un poco de mantequilla. En cuanto al relleno, hoy utilizaremos crema pastelera; pero siempre está bien innovar y experimentar con otras preparaciones. ¡Vamos con la receta! Estas filloas rellenas de crema están para chuparse los dedos. Literalmente. Dulces, suaves, delicadas y de lo más tradicionales, son el postre ideal para una comida de celebración. Si eres fan de los crepes, anímate a prepararlas y tendrás una nueva receta para tus men��s. Puedes rellenarlas de crema pastelera , como hemos hecho nosotros, o servirlas regadas con un hilillo de mantequilla derretida por encima. En cualquier caso, están deliciosas. Las filloas ( filloa significa hoja o lámina en gallego) son unas tortitas muy finas que se preparan en Galicia desde tiempos inmemoriales. Se preparan con ingredientes económicos y presentes en todas las casas. La receta tradicional se hace con caldo de carne en lugar de leche, y para engrasar la sartén se utiliza un trozo de tocino o una pella de manteca de cerdo . En época de matanza, las filloas se hacen también con sangre de cerdo : un ejemplo fantástico de cocina de aprovechamiento. Esta receta es tan antigua que se pierde en la memoria colectiva. Hay quien afirma que tienen raíces romanas, ya que allá por el siglo V en esta cultura se preparaba una torta dulce llamada phyllon (lámina en griego). Sin embargo, también hay voces que señalan a los pueblos precristianos que habitaban la Península antes de la conquista romana como los "padres" de las filloas. De hecho, en Francia afirman que las crepes son de origen celta; su similitud con el dulce gallego podría confirmar que sus raíces son las mismas. En cualquier caso, en lo que sí está todo el mundo de acuerdo es en que las filloas están buenísimas. Estas tortas finas y dulces, además, son ideales para rellenar con todo tipo de cremas o frutas. ¿Te has quedado con las ganas? Sigue investigando con unos fisuelos de Laciana, un dulce típico de León , o con unos crepes de mel i mató , una delicia clásica de la gastronomía catalana. ¡Te encantarán!