Cómo hacer una tortilla francesa: la receta básica para principiantes (te saldrá perfecta)

Una de las primeras cuestiones que cualquier aprendiz de cocinillas debe resolver es cómo hacer una tortilla francesa sin que parezcan huevos revueltos o peleados. Te explicamos cómo prepararla paso a paso

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de Cocina Fácil y periodista especializada en gastronomía

Cargando vídeo: Cómo hacer tortilla francesa

Cocina Fácil / RBA / Emma García

Cómo hacer tortilla francesa
Cocina Fácil / RBA / Emma García

Schema: Receta

 

 

Aprender a hacer una tortilla francesa es uno de los primeros pasos de cualquiera que vaya a iniciarse en el mundo de la cocina. Es perfecta para preparar una cena rápida, pero también como desayuno saludable y fuente de proteínas para encarar el día.

Aparentemente fácil, no lo es tanto cuando te enfrentas a ella por primera vez. Y te surgen dudas: ¿cómo bato los huevos?, ¿cuánta sal?, ¿le pongo aceite a la sartén?, ¿cómo sé cuando está lista? Además, a unos les gusta muy hecha, a otros que quede líquida por dentro, algunos la quieren doblada y hay quien la que la prefiere redonda.

Entonces, ¿existe la tortilla francesa perfecta? Sí, pero seguramente es diferente para cada persona. Por ello, nuestro propósito es que aprendas a hacer una buenísima tortilla básica. Una vez la tengas dominada, ya la perfeccionarás a tu gusto (puedes hacer una tortilla francesa esponjosa para chuparse los dedos) o bien ya te retarás a rellenarla con todo tipo de productos e incluso probar otros métodos como estos 5 para cocinillas avanzados.

Ingredientes básicos

  • Huevos
  • Aceite (o mantequilla)
  • Sal

Instrumental básico

  • Un tenedor o unas varillas
  • Una espátula de madera o de silicona
  • Un plato hondo o bol donde batir cómodamente
  • Una sartén antiadherente

Cómo hacer una tortilla francesa paso a paso

  • Paso 1. Bate los huevos en un bol. Puedes usar varillas manuales o un simple tenedor. Empieza a batir, ¿hasta cuándo? Pues hasta que la yema y la clara se hayan mezclado bien. Ni más, ni menos. 

Bate los huevos
Cocina Fácil
  • Paso 2. Añade una pizca de sal. Una pizca por cada huevo, si la haces de dos huevos, pues añades dos pizcas. En el punto de sal entra el gusto personal de cada uno, pero tan malo es pasarse y preparar una tortilla salada como quedarse corto. Ya lo dice el dicho, "es más soso que un huevo sin sal". En este punto, hay quien añade un poco de leche o nata a la mezcla de huevos para que la tortilla quede más sabrosa, pero no es imprescindible. Prueba a hacerla con y sin leche y decide qué fórmula te gusta más.
  • Paso 3. Calienta una sartén. Tiene que ser antiadherente, si no la tortilla se pegará y no habrá forma de darle forma. Para una tortilla francesa de 2 huevos, elige una sartén de unos 18-20 cm de diámetro. Engrásala con unas gotas de aceite de oliva y espera a que se caliente, aunque no debe llegar a humear.
Tortilla cayendo
iStock
  • Paso 4. Vierte la mezcla de huevos a la sartén. Con una espátula de madera, pasados unos segundos (cuando la parte de abajo, que está en contacto con la sartén, ya empiece a estar cuajada), empieza a doblar la tortilla sobre sí misma, haciendo 1 pliegue si quieres una media luna o bien 2 pliegues para lograr la forma alargada típica de la tortilla francesa.

Al cabo de unos segundos, ya estará lista. El punto de cocción es muy personal, pero una tortilla francesa no tiene por qué estar tostada, si te pasas de cocción te quedará demasiado seca. ¿Ya la tienes a tu gusto? Pues acerca la sartén al plato donde la vayas a servir y deja que la tortilla se deslice sobre él. Ya está lista para comer.

Tortilla francesa
iStock

Consejos para hacer una tortilla francesa perfecta

  • Utiliza huevos camperos lo más frescos posibles. Notarás la diferencia.
  • No batas los huevos en exceso. Si forman espuma, la tortilla no quedará tan esponjosa.
  • Para evitar que la tortilla francesa se pegue, usa siempre una sartén antiadherente. De hecho, lo más adecuado es tener una sartén reservada solo para este fin.
  • Respecto al aceite, no es necesario echar mucho. Con una cucharada será suficiente. 

Origen de la tortilla francesa

Este sencillo plato que supone una cena ligera, pero siempre sabrosa, tiene un curioso origen. Y es que, en contra de lo que crees, no, su origen no está en Francia. De hecho, hay indicios arqueológicos que demuestran que ya formaba parte de nuestra alimentación durante la prehistoria. Las primeras referencias se encontraron en un asentamiento en Israel donde había huevos de codorniz y fechados hace entre 4.000 y 7.500 años. 

Entonces, ¿por qué se llama tortilla francesa? Cuenta la leyenda que el origen de esta aceptción la encontramos en España, concretamente en Cádiz. Ante el asedio de los franceses en 1810 y la escasez de muchos alimentos, los gaditanos no quisieron renunciar a uno de sus platos favoritos, la tortilla de patata. De manera que prepararon los huevos solos, creando la tortilla de patata. 

Sin embargo, esta afirmación es una leyenda, ya que varios años antes, esta acepción ya se encuentra en el recetario Culina Famulatrix Medicinae, de Alexander Hunter, donde incluía la receta de A French omelette.

Venga de donde venga, sin duda es una de las bases de muchas recetas. Y, si la preparas como te hemos explicado, te quedará ¡deliciosa!