Si hay una fruta que sea armoniosa con el marisco es el aguacate . De sabor ligero, este fruto de árbol tiene la capacidad de resaltar la dulzura de cualquier fruto de mar. El primero aporta cremosidad y el segundo firmeza. En la receta que os presentamos hoy, acompañamos este magnífico dúo de ingredientes con una completa ensalada hecha con tiras de calabacín, pepino, cebolla y rábano. Como toque final, una sencilla vinagreta de lima . La frescura de las gambas y la maduración del aguacate son la clave para que este plato te quede delicioso. Los crustáceos deben oler a agua de mar; tener el caparazón firme, resistente y sin manchas negras; la cabeza translúcida y los ojos brillantes. Para comprobar que la fruta está en su punto de maduración óptimo, quítale el rabillo y si la zona que queda descubierta se ve amarillenta es que está listo para ser consumido. Disfruta de la combinación aguacate-mariscos con la ensalada de aguacate y langostinos , la ensalada de ceviche de langostinos y cebolla y el timbal de marisco y verduras . Variantes de la ensalada con aguacate y gambas: Las gambas son intercambiables por langostinos y cigalas. Puedes intercambiar la salvia por mejorana o romero. Si no dispones de tiempo, usa gambas cocidas. Para darle un toque picante a la vinagreta, añade unas gotas de salsa picante tipo Tabasco o escamas de chili rojo.