El carpaccio de ternera es un plato italiano que consiste en finas láminas de carne cruda, generalmente de ternera, aderezadas con aceite de oliva, limón, parmesano y a veces alcaparras u otros condimentos. Para cortar la carne de carpaccio de ternera, sigue estos pasos: 1. Congela la carne ligeramente: Para facilitar el corte en láminas finas, coloca el filete de ternera en el congelador durante unos 30 minutos. Esto ayuda a que la carne esté más firme y sea más fácil de cortar finamente. 2. Corta láminas finas: Después de sacar la carne del congelador, colócala sobre una tabla de cortar limpia y seca. Usa un cuchillo muy afilado para cortar láminas muy finas. Realiza cortes suaves y uniformes. El objetivo es obtener láminas translúcidas. Debes ser muy exigente con la calidad de la carne, pues no olvides que la vas a servir cruda. Consulta con tu carnicero de confianza y déjate asesorar por él. ¿Cuáles son los mejores cortes de ternera para carpaccio? El carpaccio de ternera se prepara con cortes de carne de ternera tiernos y magros. Estos son los más adecuados para esta receta. Solomillo: es uno de los cortes más populares para carpaccio debido a su ternura y sabor suave. Es magro y se presta bien para cortarse en láminas finas. Lomo Bajo: este corte proviene de la parte trasera del animal. Es magro y se puede cortar en láminas delgadas para carpaccio. Redondo: similar al lomo bajo, el redondo es otra opción magra para carpaccio. Al igual que con otros cortes, es esencial cortarlo en láminas muy finas. Cuadril: la parte más tierna del cuadril es adecuada para carpaccio. Sin embargo, ten en cuenta que puede no ser tan tierno como el solomillo, por lo que es importante cortarlo finamente.