Los champiñones se llevan bien con muchísimos ingredientes pero con los quesos de sabor fuerte hacen una pareja excepcional. Por eso nos gusta tanto esta receta (y porque es sencillísima de preparar) porque los combina sin complicaciones y porque tiene un sabor espectacular. Una de las particularidades del carpaccio es que se prepara con ingredientes crudos así que solo tendrás que asegurarte de cortar bien finos los champiñones para el obtener el mejor resultado posible. Sí, los champiñones, si están bien limpios, se pueden comer crudos perfectamente, al igual que otros vegetales como los calabacines o el hinojo . Sin embargo, los carpaccios más famosos son los de ternera, que también se suelen preparar con rúcula y que incluso se pueden marinar . El que te proponemos aquí no tiene mucho misterio. Solo hay que limpiar bien los champiñones, mejor con un trapo húmedo que sumergidos bajo el agua , eliminar el pie y cortarlos muy muy finitos con una mandolina. Luego hay que regarlos con zumo de limón para que no se oxiden y colocarlos sobre el plato con gracia, mejor con forma de flor. Para terminar, añadimos unas lascas de queso parmesano y un puñado de rúcula. Consejos: Tuesta las semillas de sésamo previamente para que aporten un aroma más marcado . Solo tienes que ponerlas en una sartén caliente y remover durante unos minutos. Otro tipo de setas con las que puedes preparar un carpaccio igual de apetecible que este son las portobello, las de cardo o los boletus.