Calabaza asada con arroz y huevo duro: una receta de temporada sencilla pero llena de sabor

Hoy te descubrimos un plato sencillo, pero con un gran sabor: una calabaza asada con arroz y huevo duro. Antes de servir, se espolvorea con cacahuetes tostados.

Jani Paasikoski

Calabaza asada con arroz y huevo duro

Exquisita calabaza asada con arroz y huevo duro.

COCINA FÁCIL / RBA / XAVIER SOLDEVILA
4 personas
50 min
392 Cal

1

(1 voto)

Dieta:

Mediterránea

Vegetariana

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Técnica mixta

Tipo Plato:

Segundos platos y platos principales

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Sin gluten

Fuente de fibra y con un alto contenido en betacarotenos, vitamina C y minerales, la calabaza es una gran aliada en la cocina. De sabor dulce y afrutado y con un vistoso color anaranjado, con ella se pueden elaborar un sinfín de platos, tanto dulces o como salados. Está muy rica cocida, frita, rehogada, asada… Prueba, por ejemplo, la crema de calabaza, cebolla y manzana, la calabaza rellena de boloñesa con queso o el bizcocho jugoso de calabaza y nueces, con crema de mantequilla.

Hoy te proponemos que prepares una calabaza con arroz y huevo duro. Asada en el horno, para que esté todavía más sabrosa y completa, se acompaña con una salsa de yogur y unos cacahuetes tostados. No te la pierdas porque la combinación de texturas y sabores es una maravilla. Seguro que repites este plato en más de una ocasión.

Ingredientes paraCalabaza asada con arroz y huevo duro: una receta de temporada sencilla pero llena de sabor

  • 1 calabaza violín
  • 200 gramos de arroz blanco
  • 4 huevos
  • 1 yogur
  • 100 gramos de cacahuetes
  • 50 gramos de frutos secos mezclados
  • 1 Cucharada de crema de sésamo (tahini)
  • 1 limón
  • 1 diente de ajo
  • cebollino picado
  • aceite
  • sal
  • pimienta

1. Asa la calabaza

Lava la calabaza, pártela por la mitad, retira las semillas y córtala en bastones. Forra una bandeja de horno con papel sulfurizado y reparte los bastones, de manera que queden separados entre sí. Sazónalos con sal y pimienta, rocíalos con aceite de oliva y ásalos durante 30 minutos a 200 ºC.

2. Tuesta los cacahuetes

Coloca los cacahuetes en una sartén sin aceite y tuéstalos ligeramente. Reserva. Calienta una olla con agua y sal y cuece el arroz hasta que esté en su punto. Escúrrelo bien y saltéalo en una sartén con aceite junto con la mezcla de frutos secos. Colócalo en una flanera, apretando con el dorso de una cuchara, y reserva.

2. Tuesta los cacahuetes

3. Cuece los huevos

Vierte agua en un cazo y lleva a ebullición, agrega un pellizco de sal, baja el fuego para conseguir un hervor suave y constante y coloca los huevos con cuidado. Déjalos cocer durante 10 minutos. Transcurrido el tiempo, refréscalos bajo el agua del grifo, pélalos y pártelos por la mitad.

4. Emplata y sirve

Vierte del zumo del limón en un cuenco y mézclalo bien con el yogur, el ajo picado, el tahine y un pellizco de sal. Reparte la calabaza asada en los platos y coloca, al lado, los huevos duros, un flan de arroz y un poco de salsa de yogur. Espolvorea los cacahuetes y el cebollino por encima. Vierte el resto de salsa en un pequeño cuenco y sirve.

Cocción en el horno

Aunque esta receta lleva algo de tiempo en hacerla porque la calabaza deberá estar 30 minutos en el horno, lo cierto es que es facilísima de hacer. Además, mientras se cuece esta hortaliza, puedes aprovechar para realizar el resto de preparaciones. Así no te darás ni cuenta del tiempo invertido.

El primer paso, por tanto, es lavar bien la calabaza, partirla por la mitad y, luego, cortarla en bastoncitos. Para cortarla con problemas, te aconsejamos que claves el cuchillo en el centro de la calabaza y, luego, en lugar de hacer fuerza hacia abajo, hagas rodar la hortaliza mientras sostienes firmemente el cuchillo con la otra mano. Así conseguirás que el cuchillo se hunda lentamente y sin riesgos.

Respecto al resto de elaboraciones, no tienen complicación alguna. Al arroz se cuece simplemente con agua y sal el tiempo indicado en el envase y, luego, se saltea con un poquito de aceite y una mezcla de frutos secos. Para que tenga todavía más sabor, puedes espolvorear por encima un poco de orégano, de tomillo seco o de cualquier hierba aromática que tengas en la cocina.

La salsa también es muy fácil. Solo tienes que mezclar un yogur natural con un chorrito de zumo de limón, un ajo picadito, un pellizco de sal y una cucharada de tahine o crema de sésamo. Remueve bien para que los ingredientes queden bien integrados y la salsita quede bien fina.

Ideas y variantes para la calabaza asada con arroz y huevo duro

  • A la hora de comprar la calabaza, elige un ejemplar que sea firme y pesado en relación a su tamaño. Si tiene magulladuras, mejor que no la cojas. También es conveniente que tenga el pedúnculo. De esta manera, evitarás que pierda la humedad. Si vas a tardar en usarla, guárdala en un lugar oscuro y seco.
  • El interior de la calabaza está lleno de pipas. Si acostumbras a tirarlas, no dejes escapar nuestro truco. Lávalas bien, retira los filamentos que tenga adheridos y sécalas con papel absorbente de cocina. Luego, colócalas en una bandeja, alíñalas con sal y aceite de oliva y ásalas en el horno a 180 °C durante 10-15 minutos. También las puedes saltear en una sartén. Las podrás comer como snack casero o espolvorear sobre una crema o una ensalada.
  • Puedes enriquecer este plato con unas lascas de queso parmesano o unas lonchas de jamón serrano crujiente.  
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