En la zona de Castilla y León, antiguamente había la costumbre de comer cagadillo por Todos los Santos . Según mandaba la tradición, el 1 de noviembre los niños iban a casa de sus abuelos a por un trozo de este caramelo casero de azúcar y frutos secos . Así que el cagadillo forma parte de nuestra cultura gastronómica más tradicional. Y como en Cocina Fácil nos encantan las tradiciones, sobre todo las que tienen que ver con la comida, no queremos dejar pasar la oportunidad de compartir la receta del cagadillo, para que no se pierda en el olvido. Parece ser que hoy ya casi nadie prepara cagadillo , y es una lástima, porque es una receta fácil, auténtica y económica. Antiguamente, el cagadillo se preparaba con almendras y/o piñones . Pero poco a poco se fueron sustituyendo estos frutos secos por cacahuetes , sin duda mucho más económicos. Como verás, el cagadillo tiene mucho en común con el guirlache . ¡Por cierto! El porqué de ese nombre tan curioso... no hay más que ver el dulce y atar cabos... Es más que un simple dulce, ya que también es un símbolo de la herencia cultural de Castilla y León , que nos transporta a épocas pasadas. Este caramelo casero , preparado con solo tres ingredientes , es el ejemplo perfecto de cómo la cocina tradicional puede ser tanto sencilla, como deliciosa. Hoy en día, el cagadillo no solo se disfruta en el Día de Todos los Santos , sino que se puede preparar en cualquier momento para recordar y celebrar nuestras tradiciones. A medida que disfrutes de este dulce, te darás cuenta de lo versátil que puede ser. La receta clásica utiliza cacahuetes , pero te pedimos que no dudes en experimentar con otros frutos secos que tengas a mano o que te gusten más. Cada variante puede aportar un toque único al sabor, haciendo que cada cagadillo sea especial. Además, el proceso de preparación es la oportunidad para involucrar a los más pequeños en la cocina , enseñándoles sobre la tradición y el valor de compartir momentos en familia . Así, además de preparar un dulce, estarás creando recuerdos que durarán toda la vida. Este dulce es un excelente acompañamiento para el café o el té en cualquier merienda o como postre en una reunión con amigos o familia . Su textura crujiente y su sabor dulce lo convierten en el capricho perfecto para cualquier ocasión. Al preparar este dulce en casa, además de honrar una tradición , contribuyes a que estas recetas se mantengan vivas, transmitiéndolas a las futuras generaciones . Así que, ¡te animamos a compartir esta delicia con tus seres queridos y a celebrar la cultura gastronómica de Castilla y León ! Consejos para preparar cagadillo Los cacahuetes o el fruto seco que desees emplear deberá estar crudo (como mucho, tostado) y sin sal. Aunque, si te van los contrastes de sabores, si utilizas frutos secos fritos y salados, es posible que descubras una delicia. El punto del caramelo es básico. Debe estar tostado, pero no quemado porque entonces amarga. Un marrón-dorado es el color perfecto para sacarlo del fuego. Prueba a hacer esta receta con frutos secos como pipas de calabaza o de girasol, pistachos, nueces de macadamia, anacardos...