Si hay algo que nunca falla como entrante, son las brochetas de hortalizas y champiñones. Ligeras, sabrosas y con ese toque a la parrilla que las hace irresistibles . A veces, lo más sencillo es lo que más sorprende y, cuando se trata de estas brochetas, la fórmula es clara: ingredientes frescos, un buen asado y un chorrito de aceite de oliva. Además, son una opción perfecta para acompañar carnes a la brasa o, si quieres algo más ligero, como entrante junto a una salsa casera . Recuerdo una cena improvisada en casa con amigos donde estas brochetas fueron el éxito de la noche. Tenía la nevera medio vacía —cosas que pasan—, pero por suerte encontré unos champiñones, tomates cherry y un par de pimientos. En menos de veinte minutos, tenía un plato colorido y saludable que hasta los más carnívoros alabaron. La clave está en no pasarse con el tiempo de plancha para que las verduras mantengan ese puntito crujiente y su sabor natural. Lo bueno de estas brochetas es que admiten mil y una variaciones. ¿Tienes calabacín, berenjena o unos espárragos en la nevera? ¡A la brocheta! Y si quieres un toque más de fiesta, unas láminas de bacon entre las verduras les dan un extra de sabor. Consejos para variar la receta Versión vegana y saciante: Añade tofu marinado en salsa de soja y jengibre entre las verduras. Le dará un toque oriental y más proteínas. Con carne: Unas tiras de pollo especiado o daditos de jamón entre las hortalizas convierten las brochetas en un plato más completo. Para los más golosos: Unas rodajas de piña asada entre las verduras aportan dulzor y combinan genial con los pimientos y los champiñones. Tienes que probar estas brochetas, son perfectas para cuidarse sin renunciar al sabor. Son bajas en calorías, ricas en fibra y antioxidantes, y su preparación no puede ser más fácil. Además, las puedes dejar listas con antelación y asarlas justo antes de servir, lo que te da margen para dedicarte a otros platos si tienes invitados. La combinación de los champiñones, con su sabor y textura jugosa, los tomates cherry ligeramente caramelizados y el toque dulce del pimiento verde es todo un acierto. Y lo mejor de todo, se preparan en apenas 20 minutos y con ingredientes que siempre tienes en la despensa. Así que la próxima vez que no sepas qué poner como entrante, acuérdate de estas brochetas. Sencillas, resultonas y saludables . ¡Anímate a prepararlas y verás cómo desaparecen del plato en cuestión de minutos!