¿Cuánto tiempo hace que no tomas de postre un arroz con leche tradicional? ¿Tal vez desde la última vez que te lo cocinó tu madre o tu abuela? Pues si era uno de tus dulces favoritos, ponte manos a la obra que es un postre fácil y económico que hay que reivindicar. Solo necesitas arroz, leche, azúcar, una ramita de canela y limón. Hay que prepararlo con paciencia, removiendo el arroz cada 6 o 7 minutos para que no se pegue a la cazuela y así vaya soltando su almidón para darle su textura cremosa tan característica. Igual que característico es el sabor que aportan la cáscara de limón y la canela. Si quieres probar versiones de este postre, no te pierdas la crema de arroz con leche caramelizada , un arroz con leche con chocolate y frutos secos o en formato pastel de arroz con leche y miel . Y si lo necesitas, por intolerancias, prueba la receta sin gluten ni lactosa . Consejos para un arroz con leche tradicional perfecto El arroz. El protagonista absoluto de esta receta es el arroz. El más apropiado es el de grano redondo, porque absorbe mejor el resto de sabores. En nuestra receta lo hervimos solo en leche pero también puede hacerse una doble cocción, primero en agua y cuando empieza a soltar almidón, pasarlo a cocer con leche. A fuego lento. Para los postres tradicionales no sirve la prisa. El arroz se añade cuando la leche empieza a hervir y entonces ponemos el fuego a mínima potencia y vamos removiendo con una cuchara de madera. El azúcar, al final. No añadas antes de tiempo el azúcar. Se añade al final y se remueve para que se disuelva en cinco minutos más de cocción. Luego se deja reposar. En lugar de azúcar podrías sustituirlo por leche condensada o dulce de leche. Leche entera. No elijas versiones desnatadas para esta receta, lo mejor es leche entera y fresca. Otras versiones. Puedes añadir piel de naranja en lugar de piel de limón. También se puede enriquecer con otras especias como vainilla, clavo, cardamomo..., algunos frutos secos, como pasas, o incluso chocolate fundido.