Aperitivo de queso cottage con tomate y albahaca: fácil, rápido y delicioso

¿Te apetece sorprender a tus invitados con un aperitivo delicioso y fácil de hacer? ¡Sigue leyendo y descubre cómo preparar estas tostadas que te encantarán!

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Ruth Puig

Periodista especializada en gastronomía

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4 personas
20 min

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Tipo Plato:

Aperitivos y tapas

Primeros platos y entrantes

Precio:

€ €

Dificultad:

Baja

¿Buscas una receta sencilla y deliciosa que sea perfecta para cualquier ocasión? Estas tostadas de queso cottage con tomate y albahaca son ideales para servir como aperitivo, entrante o incluso como una cena fácil, rápida y ligera. El pan crujiente, el frescor del tomate, el aroma de la albahaca y la cremosidad del queso cottage, todo combinado con un toque de vinagre balsámico y pimienta, hacen de este plato una delicia que seguro te encantará. ¡Anímate a probarlo!

Esta receta no solo es fácil de preparar, sino que también requiere poco tiempo y utiliza ingredientes que seguramente tienes a mano. Además, puedes personalizarla a tu gusto, agregando ingredientes adicionales según prefieras. Sin embargo, el secreto para lograr un sabor espectacular está en elegir ingredientes de calidad, pero si quieres un toque diferente e irresistible, añade un poco de ralladura de limón sobre las tostadas antes de servirlas. ¡Te sorprenderá el resultado!

A continuación te dejamos los ingredientes y el paso a paso para que prepares esta receta. ¡Vamos a cocinar!

Ingredientes paraAperitivo de queso cottage con tomate y albahaca: fácil, rápido y delicioso

  • 1 barra de pan rústico o baguette
  • 3 tomates frescos
  • 1 puñado de hojas de albahaca fresca
  • 4 dientes de ajo
  • 1 cucharada de vinagre balsámico
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 rulo de queso cottage
  • 1 pizca de pimienta negra
  • Sal

1. Prepara los ingredientes

Empieza lavando bien los tomates para eliminar cualquier impureza. Córtalos en cuartos y, con cuidado, retira las semillas para evitar que la mezcla quede demasiado líquida. Una vez limpios, corta los tomates en pequeños cubos del tamaño de un bocado. Lava las hojas de albahaca y sécalas suavemente con papel de cocina antes de cortarlas en tiras finas. Pela la mitad de los dientes de ajo y machácalos con un mortero o cuchillo, asegurándote de obtener una textura pastosa que libere todo su aroma.

2. Macera la mezcla

En un bol grande, mezcla los tomates picados, las tiras de albahaca y el ajo machacado. Añade una cucharada de vinagre balsámico y las dos cucharadas de aceite de oliva para realzar los sabores. Salpimienta al gusto, teniendo en cuenta que el queso cottage aportará un toque cremoso que equilibra la intensidad de los ingredientes. Remueve bien para que todo quede impregnado de los sabores y lleva la mezcla al refrigerador. Deja que repose durante al menos 1 hora, removiendo ocasionalmente, para permitir que los sabores se mezclen e intensifiquen.

3. Prepara el pan

Corta la barra de pan o baguette en rebanadas uniformes, de aproximadamente 1 cm de grosor, para que sean fáciles de manejar. Tuéstalas ligeramente en una sartén a fuego medio o en una tostadora, asegurándote de que queden doradas y crujientes por fuera, pero suaves por dentro. Pela los dientes de ajo restantes y frota cada rebanada de pan con ellos, dejando un suave toque de sabor. Finaliza añadiendo un chorrito de aceite de oliva sobre cada rebanada para potenciar el aroma y la textura.

4. Monta las tostadas

Una vez que el pan esté listo, comienza a montar las tostadas. Coloca una o dos cucharadas generosas de queso cottage sobre cada rebanada, distribuyéndolo de manera uniforme. A continuación, añade una porción de la mezcla de tomate y albahaca macerada encima del queso, asegurándote de cubrir toda la superficie de la tostada. Este contraste de colores y texturas hará que las tostadas luzcan irresistibles.

5. Hornea y sirve

Precalienta el horno a 200º para que esté listo al momento de hornear. Coloca las tostadas ya montadas en una bandeja para hornear, asegurándote de que queden separadas entre sí para que el calor circule bien. Hornéalas durante 10-15 minutos, hasta que los tomates estén ligeramente tostados y el pan esté bien crujiente. Sirve las tostadas calientes y acompáñalas con una bebida refrescante o un vino blanco.

Consejos finales

Si te ha gustado esta receta y planeas prepararla, aquí tienes algunos consejos para llevarla al siguiente nivel. Prueba a incorporar ingredientes como aceitunas picadas, frutos secos (nueces o almendras) o incluso un toque de pesto para añadir más profundidad al sabor…

Además, es importante no saltarse el paso de dejar reposar la mezcla de tomate y albahaca en la nevera el tiempo necesario, ya que este paso permite que los sabores se mezclen e intensifiquen, logrando una base perfecta.  Por último, asegúrate de servir las tostadas recién salidas del horno: el contraste entre el pan crujiente, el queso cremoso y el frescor del tomate te dejará sin palabras.

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