Nuestra gastronomía está plagada de dulces tradicionales, llenos de sabor y de historia. Lo s alciturrianos, un postre típico de Santander , son un buen ejemplo: con ya varias décadas a sus espaldas, son una auténtica delicia. El dulce ideal para acompañar al café o para disfrutar con una buena taza de chocolate caliente. Su curioso nombre deriva del apellido de la familia que empezó a prepararlos, allá por los años 60 del siglo XX. A día de hoy, se siguen vendiendo en la misma pastelería santanderina en la que nacieron y se pueden encontrar en establecimientos exclusivos de todo el país. La receta original es un secreto y está buenísima, pero también puedes animarte a hacerlos en casa con buenos resultados . Sigue leyendo: te explicamos cómo. ¿Has oído hablar de los alciturrianos, un postre típico de Santander que causa furor en la capital cántabra? Si no es así, es el momento de que los conozcas. Como comentábamos antes, su nombre procede del apellido Alciturri, perteneciente a la familia que inventó la receta. En 1950, la Pastelería Alciturri abrió sus puertas en una de las calles más céntricas de Santander, Peña Herbosa. Desde entonces hasta hoy, son miles los santanderinos que han acudido a ella para degustar un sabor que gana con los años. En la actualidad, Víctor Alciturri mantiene la tradición y sigue elaborando estos deliciosos dulces en su obrador. Siempre, de manera totalmente artesanal y siendo fiel a la receta original de su familia. Así que ya lo sabes: si visitas esta maravillosa ciudad, no dejes de acudir a la pastelería y llevarte una caja (por lo menos) de alciturrianos. Te lo garantizamos: te encantarán. Si te animas a prepararlos en casa, te vendrá bien contar con un robot con pala amasadora. Aunque tradicionalmente se elaboraban a mano, es una ayuda inestimable a la hora de conseguir masas elásticas y homogéneas . Ten cuidado también con la temperatura del horno y el tiempo de cocinado, para que no se te quemen. Y piensa que, cuanto más grandes sean, más tiempo de horneado necesitarás. No te quedes en esta receta: la repostería cántabra atesora joyas gastronómicas que da gusto preparar (y probar). Prueba con unos riquísimos sobaos pasiegos tradicionales , una quesada pasiega de la abuela o unos chochitos ricos , unas delicadas rosquillas con un nombre muy peculiar. ¡Espectaculares!