La tortilla de patatas de Irene Rosales y sus trucos para que quede espectacular

La tortilla de patatas siempre triunfa. Más aún si se hace con el cariño y el esmero que le ha puesto Irene Rosales a la última que ha compartido en sus redes sociales.

La modelo y colaboradora de televisión comparte con frecuencia los platos que cocina en casa. Habitualmente son platos de lo más saludables, con las verduras como protagonistas y alguna que otra proteína como el pollo o el pescado.

En esta ocasión, sin embargo, la mujer de Kiko Rivera se ha rendido ante el sabor clásico de la tortilla de patatas de toda la vida. Cada cocinero tiene su propia técnica y aunque hacerla no es complicado, siempre va bien conocer una serie de trucos para no fallar. Aquí tienes la receta básica, con o sin cebolla y a continuación unos trucos para que el resultado sea de chef.

Irene la prepara así en su vitrocerámica:

Trucos para hacer una tortilla de patatas perfecta como Irene Rosales

1. Corta la patata en trozos más o menos regulares. Hay quien prefiere cortarla en láminas finas y hay quien opta, como Irene, por cortarla en trozos más grandes, chascando la última parte. En este caso hay que cocinar las patatas a fuego muy suave para queden bien hechas por todos los lados.
2. Escurrir la patata después de freírla. Para que tengamenos aceite y la tortilla quede más suave y ligera, lo ideal es que cuando saquemos las patatas del aceite, las dejemos un rato en un colador o en un escurridor para que pierdan todo el aceite sobrante.
3. Tener los huevos a temperatura ambiente. Es otro detalle que va a hacer que cuando los mezclemos con la patata no se coagule y quede una tortilla con una textura menos agradable.​
4. Cuajar la tortilla a fuego suave. Irene ha hecho la suya al 4. Teniendo en cuenta que la potencia de la mayoría de las placas suele ir de 0 a 9, es un fuego entre medio y bajo. Esto es ideal cuando quieres que quede más o menos bien cuajada por dentro. Si prefieres que quede líquida, es mejor hacerla con un poco más de potencia.
5. Utilizar una sartén mediana y antiadherente. Esto es fundamental para que la tortilla no se nos quede pegada todo el trabajo acabe en desastre y también para conseguir que la tortilla quede gordita. Así suelen salir más jugosas que si las hacemos en sartenes demasiado amplias.