Los scones , clásicos de la gastronomía inglesa , son unos pequeños panecillos originarios del Reino Unido , que se caracterizan por tener una textura parecida a la del pan, aunque son más compactos y secos en comparación. Se preparan con harina, mantequilla, levadura en polvo, leche y a menudo se les añade azúcar y pasas. Se pueden servir tanto dulces como salados, pero su versión más tradicional es acompañarlos de mermelada y clotted cream . La clotted cream, típicamente servida con estos panecillos, es una crema que se asemeja a la nata montada, pero con un sabor más intenso y consistente , gracias a su elevado contenido de grasa. Es un elemento esencial en la tradición del té británico, donde se disfruta junto con mermelada sobre los scones recién sacados del horno. No pierdas detalle del paso que te dejamos a continuación para lograr un resultado simplemente perfecto. Scones, panecillos de la abuela inglesa Para 4 personas Ingredientes 280 g de harina de trigo 50 g de azúcar 10 g de levadura química o impulsor 1/4 de cdta de sal 110 g de mantequilla sin sal fría 1 huevo 120 ml de leche Paso a paso Mezcla los ingredientes secos En un bol, combina la harina, el azúcar, la levadura química y la sal. Estos ingredientes secos formarán la base de la masa para los scones. Incorpora la mantequilla Añade la mantequilla fría cortada en cuadrados al bol. Con la yema de los dedos, intégrala con los ingredientes secos hasta obtener una mezcla arenosa. La mantequilla fría ayudará a que los scones queden más crujientes y ligeros. Agrega huevo y leche Haz un hueco en el centro de la mezcla de ingredientes secos y agrega el huevo ligeramente batido y parte de la leche. No agregues toda la leche de una vez; reserva una pequeña cantidad y añádela si es necesario más tarde. Mezcla primero en el bol hasta obtener una masa manejable. Trabaja la masa Vuelca la masa sobre una superficie enharinada y amasa solo lo suficiente para formar una bola lisa y uniforme. Si la masa se pega un poco a las manos al principio, espolvorea un poco de harina sobre ella. Estira y corta círculos Aplasta ligeramente la bola de masa con las manos y estira con un rodillo hasta obtener un grosor de 2 cm. Utiliza un cortador redondo de 6 cm de diámetro para cortar círculos de masa. Colócalos en una bandeja de horno con papel vegetal y repite el proceso con la masa sobrante. Hornea y sirve Pinta la superficie de los scones con leche y llévalos al horno precalentado a 200º durante 15-20 minutos, o hasta que estén dorados. Una vez listos, déjalos enfriar sobre una rejilla y luego rellénalos a tu gusto.