Quizás no hayas oído nunca el nombre de frisuelos . Tampoco frixuelos . ¿Y filloas ? ¿Te suenan más? No dejan de ser primos hermanos, solo que unos proceden de Asturias y los otros, de Galicia . En León también los preparan (allí los llaman frijuelos o fajuelos ). Y aunque son una receta típica de los días de carnaval , son perfectos para cualquier otra época del año. Si tienes niños, pídeles que te ayuden a preparar la masa. Es superfácil. De hecho, solo consiste en mezclar todos los ingredientes, con la batidora, hasta lograr una masa semilíquida. Algo muy parecido a las crepes, que seguro has preparado más de una vez. Después, lo ideal es dejar reposar la masa un rato en la nevera, pero si tienes mucha prisa (o muchas ganas de comer frisuelos ¡ya!) puedes saltarte este paso. Frisuelos, frixuelos o filloas Para 4 personas Ingredientes 250 mililitros de leche entera 100 gramos de harina 2 huevos 1 cucharada de azúcar La ralladura de 1/2 naranja Una pizca de sal Aceite de oliva Paso a paso Bate los huevos y la leche Vierte la leche en un cuenco grande (te irá mejor y evitarás que la masa salpique al batirla), añade los 4 huevos y bate con las varillas eléctricas hasta integrarlos. Añade la harina Agrega la harina poco a poco, tamizándola sobre la mezcla de huevos y leche, a la vez que sigues batiendo. Incorpora también el azúcar. Agrega la sal y la ralladura de naranja Añade una pizquita de sal a la masa, también la ralladura de piel de naranja, y vuelve a batirla. Deja reposar la masa Cubre el cuenco con film transparente y deja reposar la masa en la nevera, entre media hora y 1 hora. Cocina los frisuelos Pon una sartén antiadherente de unos 20 centímetros de diámetro al fuego. Pincélala con aceite de oliva y, cuando esté bien caliente, vierte un cacillo de masa en el centro. Mueve la sartén para que la masa cubra todo el fondo (tienes que poner poca masa si quieres que los frisuelos te queden bien finitos, como tienen que ser). En unos segundos estará hecho por un lado. Dale la vuelta y cocina por el otro lado unos segundos. Pon el frisuelo en un plato y cúbrelo con un paño limpio. Haz frisuelos hasta terminar la masa Realiza el mismo procedimiento, cocinando frisuelos hasta terminar la masa. Sírvelos enseguida, calientes. Cómo y con qué comer las filloas En la receta tradicional se toman simplemente espolvoreados con azúcar, pero puedes usar otros rellenos dulces para degustar tus filloas. Eso sí, es imprescindible tomarlas calientes y en buena compañía, familia y amigos son dos buenas opciones. Nata montada o trufa son un relleno ideal. Con crema de cacao o chocolate fundido son irresistibles. Puedes espolvorearlos con frutos secos picados (nueces, avellanas, almendras, pistachos...). Mermelada o membrillo también funcionan para rellenar frisuelos. Fruta fresca cortada en trozos pequeños, compotas y coulis les darán un toque refrescante. Queso fresco o requesón y un poco de miel... ¡qué delicia! Y si los frisuelos te apetecen más con algo salado, no le pongas azúcar a la masa y sírvelos con embutidos y quesos, verás qué buenos quedan. También es una idea genial para la cena. Alternativas a las tradicionales filloas Si quieres rebajar un poco las calorías, puedes utilizar leche desnatada en lugar de leche entera. La receta original se hace con azúcar blanquilla, pero con azúcar moreno o panela también salen bien. Si te gusta más el sabor a limón que el de naranja, sustitúyelos en la receta.