Papas o patatas arrieras, receta de la abuela andaluza típica del verano (facilísima)

Clásicas de la cocina tradicional andaluza, las papas arrieras son una de las tapas más conocidas que no pueden faltar en ninguno de sus bares

Marina Blanco, colaboradora de Cocina Fácil
Marina Blanco

Experta en cocina

Cargando vídeo: Patatas arrieras

Cocina Fácil / RBA / Irene Requena

Patatas arrieras
Cocina Fácil / RBA / Irene Requena
4 personas
25 min

3

(41 votos)

Temporada:

Verano

Tipo Plato:

Aperitivos y tapas

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Las recetas con patatas son de las que más cunden, son súper económicas, y además hay tantas recetas diferentes, que no te cansarás de buscar nuevas formas de prepararlas.

Si hablamos de recetas andaluzas con patatas, no podemos dejar de mencionar las famosas patatas aliñadas al estilo del Faro de Cádiz, las papas rocieras o las patatas mozárabes que puedes ver en este vídeo:

Así preparadas en casa de una manera tan sencilla, podrás servirlas como aperitivo, entrante, o como plato en una comida de picoteo. Es una receta barata, fácil, y muy rica que seguro que es del gusto de todos los comensales.

Ingredientes paraPapas o patatas arrieras, receta de la abuela andaluza típica del verano (facilísima)

  • 3 patatas grandes
  • 15 gambones
  • 3 dientes de ajo
  • 1 guindilla
  • Aceite de oliva
  • Sal
  • Perejil
  • Para la salsa
  • 200 mililitros de aceite de girasol
  • 1 diente de ajo sin el germen
  • 1 huevo
  • 1 cucharada de vinagre
  • Sal

1. Cuece las patatas

Pela y lava las patatas, trocéalas y cuécelas en abundante agua salada durante 20 minutos. Pasado el tiempo, escurre las patatas y resérvalas.

2. Prepara la salsa

Mezcla en el vaso de la batidora los ingredientes para la salsa, y bate con la batidora como si estuvieses haciendo una mayonesa, primero con la batidora al fondo y sin moverla, y en cuanto la salsa comience a ligar, mueve de abajo hacia arriba hasta obtener una salsa cremosa.

3. Cocina los gambones

Pela y lamina el ajo, y pela los gambones. Sofríe el ajo laminado en una sartén con un fondo de aceite de oliva junto con la guindilla, y en cuanto el ajo comience a dorarse, retira la guindilla del fuego. Agrega los gambones, y cocínalos un par de minutos. Aparta la sartén del fuego.

4. Prepara las patatas

Mezcla las patatas con la salsa, colócalas en una fuente, y sírvelas con los gambones al ajillo por encima y un poquito de perejil picado.

Realmente son irresistibles, se preparan cociendo las patatas, y se acompañan con gambones sofritos con ajito y aceite de oliva, después se sirven con una salsa mayonesa casera con un poquito de ajo y vinagre.

¿Cuáles son las mejores variedades de patata para cocer?

Hay muchas patatas distintas y si quieres conseguir los mejores resultados, es importante que sepas qué variedades son mejores para cocinarlas cocidas, como en esta receta de papas arrieras.

Patata Kennebec

La patata Kennebec tiene una piel lisa y clara, y su carne es blanca. Después de la cocción, conserva su forma y no se deshace fácilmente. Esto la convierte en una buena opción para recetas como ensaladas de patata, guisos, sopas o simplemente como guarnición.

Además de su textura, la patata Kennebec tiene un sabor suave y agradable. Es versátil en la cocina y se adapta bien a diferentes métodos de cocción. Si estás buscando una patata que se mantenga firme y tenga una textura agradable al cocerla, la patata Kennebec puede ser una excelente elección.

Patata Red Pontiac

Esta patata tiene una piel roja distintiva y una carne blanca o amarilla pálida. Es conocida por su textura firme y su sabor ligeramente dulce. Al cocerla, la patata Red Pontiac retiene bien su forma y no se deshace fácilmente.

Es apreciada por su sabor y su capacidad para absorber bien los sabores de los condimentos y las salsas.

Patata Monalisa

Es una patata de piel amarilla clara y carne amarilla, y se caracteriza por tener una textura firme y cremosa. Su textura también la hace ideal para purés de patata suaves y cremosos.

Patata Agria

Esta variedad de patata tiene una piel rugosa y una carne amarilla. Es conocida por su textura harinosa y su sabor intenso. Aunque suele utilizarse más para freír, también se puede cocer y resulta deliciosa en platos como guisos.

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