Panna cotta de limón, postre fácil ¡con 4 ingredientes!

Esta panna cotta que nos descubren te va a conquistar. Queda suave, cremosa y tiene un sabor a limón espectacular

Rosa Mestres
Rosa Mestres

Periodista especializada en gastronomía

Panna cotta de limón con arándanos
YouTube de Pasión por la repostería y mucho más…

Muy típica de Italia, concretamente de la zona del Piamonte, la panna cotta, que se podría traducir por nata cocida, es un postre que causa sensación a la que llega a la mesa. Y es que su textura fina, similar a un flan, y su sabor delicioso cautivan a todo el mundo.

Si tienes niños en casa, no dejes de ofrecérselo. Seguro que te pedirán repetir. Si quieres prepararla hoy en casa, no te pierdas este vídeo del canal 'Pasión por la repostería y mucho más… '. ¿Manos a la obra?

Sin gelatina

Elaborada con solo cuatro ingredientes, nata con un 35 % de materia grasa, azúcar, limón y arándanos, esta receta tiene la particularidad que está hecha sin gelatina ni claras de huevo. En este caso, el limón ayuda a hacer cuajar la mezcla y hace que quede suave y muy cremosa.

Una vez tengas la panna cotta en los vasitos, ten presente que deberás dejarla reposar en la nevera durante cuatro horas, como mínimo, para que coja densidad y cuaje. Y, si tienes tiempo y paciencia, déjala de un día para otro. Así quedará perfecta.

Panna cotta de limón con arándanos
Para 4 personas
Ingredientes
  • 400 mililitros de nata para montar (35 % M.G.)
  • 100 gramos de azúcar
  • 60 mililitros de zumo de limón
  • La ralladura de ½ limón

    Para la salsa
  • 125 gramos de arándanos
  • 30 gramos de azúcar
  • 1 cucharadita de zumo de limón
Paso a paso
  1. Cuece la nata

    Coloca la nata en el fuego, agrega el azúcar y lleva a ebullición. Deja hervir la mezcla durante 3 minutos, sin dejar de remover. Retira del fuego y añade el zumo de limón y la ralladura. Remueve de nuevo y deja reposar 5 minutos.

  2. Viértela en vasitos

    Pasa la mezcla por un colador y viértela en los vasitos escogidos, sin llenar completamente para poder poner, luego, la salsa de arándanos. Déjalos en la nevera un mínimo de 4 horas.

  3. Elabora la salsa

    Pon los arándanos, el azúcar y el zumo de limón en un cazo y lleva a ebullición. Cuando la mezcla empiece a hervir y el azúcar se haya disuelto, ve removiendo hasta que los arándanos empiecen a deshacerse. Cuando todavía queden algunos enteros, retira la salsa del fuego, pásala a otro recipiente y déjala enfriar.

  4. Sirve la panna cotta

    Transcurridas las 4 horas, vierte la salsa de arándanos sobre la panna cotta y sirve.

 

Consejos y variantes

  • Esta panna cotta se puede acompañar con cualquier otra salsa. En lugar de arándanos, puedes optar por frambuesas, fresas, moras, cerezas, mango, melocotones… También puedes utilizar una mermelada o confitura que tengas en casa.
  • Si quieres que este postre tenga un toque crujiente, agrega unos trocitos de galleta o de muesli por encima.
  • Si no te gusta encontrar trocitos de fruta, deja más tiempo la salsa en el fuego y, luego, pásala por un colador de malla fina.

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