U n buen montadito de pringá con una bebida fresca cae de maravilla a media mañana. Y si no, que se lo digan a los sevillanos, donde esta tapa es casi una religión. Es una receta de aprovechamiento cien por cien, que se prepara con la carne y de las sobras del cocido (o puchero, para ser exactos) sobre uno de los panes más ricos de nuestra geografía: el mollete. Puede parecer algo simple, pero la pringá es una receta con mucha tradición a sus espaldas. Hay expertos que afirman que deriva de la adafina sefardí , un cocido del siglo XV que se preparaba el viernes por la noche para consumirlo el sábado: así no era necesario cocinar y se podía respetar el sabbat . Lógicamente, entonces se preparaba con carnes que no fueran de cerdo. Hoy, el montadito de pringá no ha cambiado mucho desde entonces. Prepararlo es bien sencillo: solo hay que coger la carne y el embutido sobrantes del cocido o puchero (puedes añadir un poco más para asegurarte de que sobrará), machacarlos hasta hacer una pasta y extenderla sobre un mollete tostado. Si antes calientas un poco las sobras, serán más fáciles de extender y el montadito ganará en sabor y textura. Montadito de pringá, la tapa sevillana que aprovecha las sobras del cocido Montadito de pringá Para 4 personas Ingredientes Sobras del cocido: tocino (mejor, entreverado), morcillo, carne de cerdo, gallina, chorizo, morcilla... 2-3 cucharones de caldo del cocido 4 molletes Sal Especias (opcionales) Paso a paso Desmenuza las carnes Si las carnes están frías, témplalas un poco en el microondas, el horno o la sartén con una gota de aceite. Ten cuidado para que no se sequen: tampoco tienen que estar muy calientes. Desmenúzalas con un tenedor; antes, quita la piel de la morcilla y el chorizo, y si los tiene, los huesos de la gallina. Si hace falta, pica las carnes más tersas con un cuchillo. Añade el tocino y el caldo Agrega el tocino y aplástalo bien para que la masa quede untuosa. Ve añadiendo caldo para evitar que quede demasiado compacta; buscamos una textura similar a la de una sobrasada. Prueba de sal y rectifica si hace falta. Si quieres, puedes añadir alguna especia (aunque la receta tradicional no las lleva): la pimienta negra le va muy bien. Tuesta el pan y rellénalo Abre los molletes y tuéstalos. Reparte la pringá entre los cuatro; si tienes una sandwichera, mételos de nuevo y dales un golpe de calor para tostarlos un poco más. ¡Y no tardes ni un minuto más en servirlos! Una receta que nunca falla Ya lo sabes: cuando hagas un cocido contundente, aprovecha para preparar unos montaditos de pringá para el día siguiente. Por ejemplo, puedes hacer el puchero el sábado y poner los montaditos en el aperitivo del domingo. ¿Te gusta la idea? Pues anímate a hacer un puchero con pringá con la receta tradicional de la abuela andaluza, una ropa vieja con restos de pringá o unas albóndigas de pringá, riquísimas.