Preparar la mermelada de cuajada de limón
Comienza mezclando el azúcar con la ralladura del limón. Después exprímelo. En un cazo mezcla las yemas, el azúcar con la ralladura y una pizca de sal, y remueve con unas varillas. Agrega la Maicena tamizándola con un colador y vuelve a mezclar. Ahora tienes que añadir la leche y el zumo del limón.
Llevar al fuego
Coloca el cazo en el fuego bajo y no pares de remover la mezcla. Verás que poco a poco va espesando. Retira del fuego.
Terminar la mermelada
Añade a la mezcla caliente la mantequilla sin sal y remueve hasta que se derrita por completo. Puedes añadir una cucharada de licor de limón, aunque esto es opcional.
Dejar enfriar
Pasa la mermelada a un recipiente de cristal y tapa con papel film de forma que esté en contacto con la mezcla para evitar que se forme costra al enfriarse. Déjalo en la nevera hasta que esté totalmente frío.
Preparar el bizcocho
Pon en un recipiente de cristal el chocolate blanco, la leche y el aceite de oliva. Derrite el chocolate al baño maría.
Hacer la masa del bizcocho
En un cuenco debes poner las tres yemas junto con el azúcar. Mezcla con las varillas hasta que adquiera un color marfil. Después añade la mezcla de chocolate blanco e integra totalmente. Incorpora la harina de repostería, junto con la levadura, tamizando con el colador, y remueve con las varillas. Reserva la mezcla procurando que se mantenga caliente.
Montar las claras
En otro recipiente debes poner las tres claras de huevo bien frías y montarlas con ayuda de unas varillas eléctricas. Añade el azúcar en tres tiempos, sin dejar de mezclar, y a continuación integra las claras montadas con la masa del bizcocho.
Hornear el bizcocho
Vierte la masa en un molde de unos 38x29 cm protegido con papel de horno. Puede servir la bandeja del horno si no es demasiado grande. La clave está en conseguir un bizcocho extendido y fino, que pueda enrollarse después con cierta facilidad. Hornea unos 10 minutos a 165ºC. Una vez horneado, dale la vuelta en una superficie plana y retira el papel de horno. Corta el bizcocho por la mitad en sentido longitudinal o a lo largo, y hacer en uno de los bordes un corte oblicuo.
Poner el almíbar
Mezcla el agua, el azúcar y el zumo de limón e impregna con este almíbar el bizcocho. Extiende sobre una de las mitades del bizcocho, la mitad de la mermelada de cuajada de limón que tenías enfriando, alisando con una paleta. Haz lo mismo con la otra mitad del bizcocho.
Enrollar el brazo de gitano
Enrolla el bizcocho con cuidado, envuélvelo en un papel de horno como si fuera un caramelo, y mételo en la nevera durante dos o tres horas mientras se enfría. Si tienes una tabla de cortar de silicona, pon el paquete con forma de caramelo dentro y dóblala para hacer más fuerza y que el bizcocho vaya cogiendo forma de rulo. Repite la operación con la otra mitad del bizcocho.
Presentación
Una vez hayan transcurrido dos o tres horas, ya puedes sacar el brazo de gitano de la nevera y desenvolverlo. Habrá adquirido forma de rulo y estará en su punto. Para servirlo, córtalo con cuidado porque es ligero y puede deshacerse con cierta facilidad. ¡Riquísimo!