Seguro que, con la llegada del otoño, estás deseando incorporar a tus menús alimentos propios de la nueva estación. Y uno de los más versátiles y sabrosos es, sin lugar a dudas, el boniato , también llamado moniato o batata . Con una pulpa dulce de vistoso color naranja, que cautiva a todo el mundo, este tubérculo es un gran aliado en la cocina. Hoy te proponemos añadirlo a una sencilla tortilla de patatas . No te pierdas esta receta, porque el boniato aporta al plato un delicioso sabor que te encantará. A la hora de realizar la tortilla, es importante que las rodajas, tanto de patata como de boniato, no sean demasiado gruesas y, más o menos, de un grosor similar. Así se cocerán más rápido y en el mismo espacio de tiempo. Luego, una vez fritas, acuérdate de dejarlas unos minutos sobre papel absorbente para que suelten el exceso de grasa y la tortilla no quede aceitosa. En este punto, solo te quedará cuajar la tortilla a tu gusto y… listos. Un apunte: aunque sola está muy rica, te aconsejamos acompañarla con burrata y unas hierbas aromáticas. La combinación de sabores y texturas te sorprenderá. Si te han entrado ganas de descubrir otras recetas con boniatos, echa un vistazo al gratén de patatas, boniato y calabaza y la tarta de boniato con brócoli . Y si buscas una receta dulce, prueba la corona de bizcocho de boniato con frutas y glaseado . Ideas para la tortilla de patatas y boniato Boniatos. En el momento de comprarlos, fíjate que sean firmes y con la piel en buen estado, sin golpes ni magulladuras. Patatas. Escoge una variedad que sea especial para freír. Así durante la fritura, absorberá menos aceite. Huevos. Procura que sean muy frescos y mejor si son de corral. Para que la tortilla te salga más esponjosa, bate las yemas y las claras por separado. Después, júntalas en un cuenco y sazónalas.