Después de una comida copiosa no apetece tomar un postre también contundente. Aquí tienes una opción superdigestiva, que al estar preparada en forma de tartar, queda muy bien. Puedes elegir las frutas de temporada que más te gusten. Por ejemplo, el melocotón puede ser en almíbar, que también le aporta un dulzor extra. Eso sí, la medida de las frutas cortadas tiene que ser similar para que te quede bien la presentación.