¿Qué sería de una fiesta de Halloween si no tuviera una tarta espeluznante? Si estás buscando sugerencias, aquí tienes una que causará sensación a la que la lleves a la mesa. Una tarta con sus tumbas, sus fantasmas, su árbol tenebroso… La gracia de esta tarta es, evidentemente, su decoración. Prepara un bizcocho clásico de cacao , que quede esponjoso por dentro y firme por fuera, y, sobre él, empieza a colocar todos los elementos del cementerio. Primero, cúbrelo con las galletas oreo picadas, que simularán la tierra. Luego, clava en el bizcocho unas galletas rectangulares con letras, a modo de tumbas. Y, finalmente, realiza un árbol seco y unos fantasmas con fondant de chocolate negro y blanco. Quedará espectacular. Si te apetece acompañar este pastel con galletas y dulces de miedo, fíjate en las trufas murciélago , en las momias de hojaldre y en las galletas fantasmas. Consejos para la tarta de Halloween Si quieres que el bizcocho quede tierno y sin grumos, es importante tamizar la harina con la levadura y el cacao . Coge un colador y deja pasar la harina mientras vas moviendo. Antes de empezar a trabajar, enciende el horno para que se vaya calentando. Así, al introducir la masa, estará a la temperatura indicada en la receta. Para las tumbas te servirá cualquier galleta rectangular que no sea muy grande. En lugar de usar la manga pastelera para escribir las letras, puedes utilizar un lápiz pastelero .