Que el secreto está de moda ya no es un secreto... Cada vez son más los adeptos a esta sabrosa carne de cerdo que se esconde en la parte interior del lomo del animal. Esta carne es una parte del cerdo muy apreciada también por los grandes cocineros, dada su versatilidad. Tiene un sabor suave y una textura tierna y jugosa que suele gustar a todos los paladares. Hoy, en Cocina Fácil hemos querido preparar un aperitivo original, por si quieres servirlo en tiras, de bocado, que puedes presentar también con unos pinchitos para ir picando. Lo diferente de esta propuesta es la costra caramelizada de la carne. Es muy fácil, solo hay que cubrir los pedacitos de secreto con azúcar moreno antes de hornear para que quede una crujiente y rica costra . Antes de hornear la carne, te recomendamos que la dejes atemperar fuera de la nevera durante una media hora. Siempre es mejor que las carnes no sufran un cambio brusco de temperatura para que el resultado sea más jugoso. Cocinar carnes con costra es una opción muy apreciada, prueba también esta ternera con costra de hierbas o esta otra receta preparada con aguja de cerdo y costra de frutos secos. La carne del secreto es muy jugosa y tierna, tanto es así que cuenta la leyenda que antes los carniceros ocultaban esta información y lo destinaban al consumo propio. Hoy es patrimonio de todos los comensales... Esta carne es apta tanto para hornear, saltear como para asar en la parrilla. También se le puede dar un sabor extra, cocinándolo con un marinado o rellenándolas, como nuestra propuesta con cebolla caramelizada. Y, si, además, eliges el secreto de cerdo ibérico, una de las carnes más sabrosas y jugosas que te puedes encontrar y que además ahora, para nuestra fortuna, es muy fácil de encontrar en cualquier supermercado, el sabor será aún más delicioso, más que nada porque la calidad de la grasa del cerdo ibérico es excepcional y eso se nota mucho en el resultado final. Tienes que preparar esta receta, sea para un día de diario u otro más señalado, te aseguro que nunca falla y va a encantar a tus comensales. ¡Qué aproveche!