El roscón de Reyes es uno de los platos fuertes de la Navidad y es el que los enamorados de este dulce suave esperamos con más impaciencia. Hay quien es fan incondicional de turrones y mantecados y hay quien prefiere este bizcocho esponjoso que siempre guarda en su interior alguna sorpresa (ya sea en forma de relleno o de regalito). Es verdad que se trata de una receta bastante elaborada pero si te gusta tanto como a nosotras, ¿por qué no probar a hacerlo en casa? Lleva tiempo sí, pero en realidad no es demasiado complicado si ya tienes algo de experiencia levando masas o, al menos, con la repostería. Esta masa tiene que levar dos veces, una hora cada vez, así que es perfecto para ir intercalando otras tareas o preparar otras recetas que necesites tener listas para la comida del día de Reyes y así ir adelantando trabajo. O también puedes ponerte una peli y verla en dos veces... El caso es que es muy sencillo de hacer, ¡que no te dé miedo! Y no te preocupes porque no vayas a encontrar las frutas escarchadas porque la repostería casera está tan de moda que es sencillísimo encontrarlas en cualquier tienda de alimentación o supermercado sin tener que recurrir a lugares especializados. ¡No tienes excusa! Consejos: ¿Notas que la masa te ha quedado más cocida de la cuenta? Salva tu roscón rellenándolo de trufa o nata o haz mitad y mitad . Quedará mucho más jugoso y no se notará nada que esta sequito. ¡No te olvides del agua de azahar! Las frutas escarchadas son casi opcionales, de hecho puedes ponerle solo de un tipo o incluso pasar de ellas y espolvorearlo con almendras fileteadas y azúcar granulado sin más. Pero el agua de azahar no puede faltar en tu masa , es lo que le da al roscón de Reyes ese aroma tan característico e irresistible.