La leche merengada es una bebida perfecta para el verano. Servida bien fresquita o granizada con un poco de canela por encima y un barquillo es todo un placer para el paladar. Hoy te proponemos una deliciosa variante de esta receta tradicional: unos polos de leche merengada. Muy fáciles de preparar, aunque algo laboriosos, para que estos polos de leche merengada te queden perfectos y con un sabor exquisito, tienes que realizar dos pasos fundamentales. Por un lado, aromatizar la leche con la ramita de canela y la ralladura de limón , y, luego, preparar la nata montada . Si quieres que quede bien montada y aporte toda su cremosidad al polo, procura que tanto la nata como el cuenco y las varillas estén bien fríos, así tendrás mejores resultados. Luego, añade el azúcar glas y ve batiendo hasta que se formen unos picos suaves. Una vez tengas la leche y la nata preparadas, solo tendrás que verter la mezcla en los moldes y… a congelar. ¿Quieres descubrir más polos realizados con leche? Echa un vistazo a los polos con fruta de temporada , los polos de chocolate y vainilla o los polos almendrados . Consejos para los polos de leche merengada Para desmoldar los polos fácilmente, sumérgelos durante unos segundos en agua templada o déjalos un momento debajo del grifo con agua caliente. Cuando rellenes los moldes, acuérdate de no llegar hasta el borde ya que el líquido, al congelarse, podría rebosar . Si no encuentras moldes de polo, puedes usar vasitos de yogur. Y en lugar de palitos, puedes colocar cucharitas de café. Con esta misma receta puedes elaborar una leche merengada para beber . Congélala solo 1 hora. Luego, remuévela bien y repártela en vasos.