Milhojas de calabacín con salmorejo: la deliciosa receta de temporada que vale como primer plato o como plato único

Una receta muy de temporada porque tanto el salmorejo como los calabacines están en su máximo esplendor. Una propuesta que combina dos platos de toda la vida con un crujiente rebozado

 Virginia Serrano
Virginia Serrano

Periodista especializada en gastronomía

Milhojas de calabacín y salmorejo

Milhojas de calabacín y salmorejo

Cocina Fácil / RBA/ Virginia Serrano
4 personas
45 min

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Dieta:

Mediterránea

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Fritura

Tipo Plato:

Primeros platos y entrantes

Aperitivos y tapas

Precio:

Económico

Dificultad:

Fácil

No hay mejor tiempo para degustar el calabacín de cercanía. La planta crece durante todo el verano para ofrecernos un fruto que en España tiene docenas de cocinados y que es parte de platos muy tradicionales. Y lo mismo con el salmorejo, cuya base principal es el tomate. 

Eso sí, aunque se traten de ingredientes de temporada, lo cierto es que puedes encontrarlos en el súper durante todo el año, lo que convierte a esta receta de temporada en una alternativa ideal para cocina en cualquier época del año. 

La elaboración que te ofrecemos hoy aúna sabores de toda la vida: rebozados y salmorejo de las abuelas para conjugar un aperitivo, o primer plato, con el que se chuparán los dedos todos los que se sienten a tu mesa.

A todas estas ventajas se suma que es un plato muy versátil, ya que lo puedes cocinar como primer plato o, incluso, como plato único. Y en este caso, te recomendamos que lo acompañes de un arroz blanco aromatizado con ajo, comino, curry europeo y albahaca fresca. Ponle pasas o dátiles para darle un punto dulce y exótico. 

Para hacer esta receta, lava los calabacines y cocínalos sin quitar la piel y cortándolos en capas. La idea de la elaboración es alternar las "hojas" de la hortaliza con el salmorejo y que los dos sabores se mezclen en el bocado. Son ideales para un aperitivo original y para cualquier época del año. 

Para el rebozado hemos utilizado huevos batidos y pan rallado, pero también puedes incluir en la elaboración harina de trigo, de maíz o de tempura. Sigue el paso a paso y conviértelo en tu plato estrella. 

Cómo hacer milhojas de calabacín con salmorejo paso a paso

Ingredientes paraMilhojas de calabacín con salmorejo: la deliciosa receta de temporada que vale como primer plato o como plato único

  • Para el salmorejo
  • 250 gr de tomates maduros
  • 200 gramos de migas de pan
  • 1 diente de ajo
  • 50 mililitros de aceite de oliva virgen extra
  • Vinagre
  • Sal y pimienta
  • Para los calabacines
  • 1 calabacín grande
  • 2 huevos
  • Pan rallado

1. Prepara el pan del salmorejo

Antes de comenzar a preparar el calabacín, lo mejor es que tengas el salmorejo preparado. Lo puedes hacer el día anterior o previamente. Para comenzar, corta el pan en daditos, ponlo en una bandeja de horno e introdúcelo a 160 ºC durante 10 minutos o hasta que esté dorado. Ponlo en un bol y deja que se enfríe.   

2. Añade los tomates del salmorejo

Sobre el pan tostado, echa los tomates cortados, el ajo, el aceite, el vinagre, la sal y la pimienta. Cuando el pan se haya reblandecido, echa todos los ingredientes en el vaso de la batidora. 

3. Tritura

Con la batidora, tritura los ingredientes hasta obtener una crema consistente de textura fina. Déjalo tapado en la nevera mientras realizas el resto de platos. Y recuerda darle vueltas antes de montar tu milhojas. 

4. Prepara los calabacines

Coge los calabacines y lávalos bien. Puedes quirales la piel o dejarla, como prefieras. Después, córtalos en láminas finas de forma longitudinal de medio centímetro aproximadamente.

5. Bate los huevos

En un bol, echa dos huevos, con los que tendrás suficiente para realizar esta receta. Bátelos como si fueras a preparar una tortilla. A continuación, añade sal y pimienta al gusto.

6. Reboza las rodajas de calabacín

Con el calabacín ya cortado y el huevo batido, tendrás que pasar cada lámina de calabacín por el huevo y después por el pan rallado. Puedes sustituir el pan rallado por harina, dependiendo del rebozado que prefieras o hayas elegido prar preparar este plato. 

7. Fríe la verdura

En una sartén, calienta bien de aceite. Cuando esté muy caliente, toca fríe el calabacín rebozado. Hazlo, al menos, un minuto por cada cara, hasta que estén dorados. Con eso será suficiente.

8. Monta las milhojas

Intercala las capas (máximo 4) del calabacín rebozado con una buena cucharada de salmorejo y estará listo para comer.

Esta es una manera de comer el salmorejo muy original, como si fuera una salsa de tomate, pero hay otras muchas recetas en las que lo puedes utilizar. Un buen ejemplo es este salmorejo con pulpo asado, estas tostas de salmorejo y boquerón o esta tempura de bacalao con salmorejo.

Incluso puedes darle un toque diferente, como el de este salmorejo de melocotón, ideal para la temporada estival, o el flan de salmorejo con jamón, una manera distinta de comer este plato cordobés. 

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