El solomillo de cerdo admite montones de acompañamientos diferentes, algunos hasta dulces porque se lleva de maravilla con frutas y frutos secos, pero en este caso hemos querido servirlo con una escalivada de hortalizas y verduras y un concassé de tomate . De esta manera conseguimos hacer de él un plato mucho más saludable y equilibrado para el día a día. No es demasiado complicado de hacer porque la mayoría del trabajo se la lleva el horno pero hay que dedicarle un ratito a pelar todas las verduras una vez cocinadas. Te recomendamos que empieces por este paso y después cocines el solomillo justo en el momento de servirlo para que este no se enfríe aprovechando que tienes el horno todavía encendido. Además de la escalivada , hemos querido añadir una tercera elaboración, el concassé de tomate , que no es más que un aliño hecho a base de tomate salteado con cebollino picado, sal y pimienta. La forma de emplatar es la que pone la guinda y hace que un plato bastante sencillo se convierta en una receta de fiesta. Seguro que si la sirves cuando tienes invitados en casa se quedan maravillados con su aspecto y es que los colores de las hortalizas quedan de maravilla sobre el plato. Consejos: Si van a venir invitados a casa puedes dejar la escalivada hecha del día anterior para que no te lleve tanto tiempo limpiar y cortar las verduras y así las tendrás listas para servirlas una vez prepares el solomillo. Si quieres añadir algún fruto seco a la preparación, las almendras pueden ser la opción ideal e incluso puedes darle un toque otoñal sirviéndolo con castañas. Puedes añadirlas al concasé bien machacadas o ponerlas enteras junto a la escalivada.