Infusión de hibisco y jengibre con un toque cítrico

Paso 1

Se elabora en frío, sumergiendo las hierbas y la mandarina desgajada en el agua fría. Se mantiene en la nevera 3 o 4 horas.

Paso 2

Se filtra y se le agrega el zumo de limón. Se decora con unas hojas de menta y, si se desea, una rodaja de limón o unos gajos de mandarina.

Paso 3

Cómo tomarla: Fría o muy fría, sacada de la nevera, o mantenida un rato en el congelador.  Resulta muy apetecible a media tarde o tras un esfuerzo físico. Tiene un sabor intenso, con el requerido matiz alimonado. Propiedades: Es una infusión muy adecuada para favorecer la digestión y combatir la pesadez estomacal, la inflamación gástrica y las náuseas.