La oferta de dulces y figuritas de chocolate que puedes encontrar estos días en las pastelerías es amplísima, lo sabemos. Pero ¿qué mejor que preparar en familia algún postre típico y, por qué no, el huevo de chocolate de Pascua? Una vez hecho, te puede servir como un detalle perfecto para regalar. La elaboración es sencillísima, solo hay que fundir el chocolate al baño maría. El resto es tener paciencia con las temperaturas , para extender el chocolate, introducirlo en el molde con forma de huevo y poder sellar las dos mitades con chocolate más caliente. Y ya que es primavera, la decoración no podía ser de otra manera, la hemos hecho con fondant blanco , que estiramos con un rodillito y después le damos forma de florecitas para decorar nuestro huevo de Pascua. Si te atreves con postres más elaborados, mira cómo hacer una mona de Pascua casera :