Saltear los guisantes con jamón, pavo o beicon es una de las formas más fáciles y ricas de tener un plato completo y rico en un tiempo récord. Lo más socorrido y clásico es preparar unos guisantes (congelados) con jamón, pero no te creas que se juntan las dos cosas y listo. Todo tiene su truquillo para que quede un plato digno. Mira cómo los preparamos en Cocina Fácil: Aprovecha la primavera para preparar platos deliciosos con los guisantes frescos , que recién desgranados son una maravilla de sabor (y ya no hablamos de la variedad lágrima..., una auténtica joya de la gastronomía). Lo malo es que la temporada es corta. Pero afortunadamente, hay buenas ofertas de guisantes congelados que te pueden servir igual para nuestra receta. Eso sí, ya sabes que no todas las calidades son las mismas . Elige unos guisantes bien tiernos y pequeñitos, de una marca reconocida. Ya que el plato es sencillo, procura que la calidad sea buena. Si tienes pechugas de pavo frescas, córtalas a trocitos y saltéalas. Ganará en sabor. Y, cómo no, utiliza un buen vino blanco, nada de envases en tetrabrick. Los guisantes, además de un plato principal (y hasta único, porque son legumbres) son buenos acompañantes de guisos de pescado, carne, albóndigas...