Si hay un plato de cuchara tradicional por excelencia, ese es la fabada asturiana. Y no solo asturiana, la fabada es uno de los diez platos más conocidos de nuestra gastronomía, que ya se empezó a consumir en el siglo XVI... La fabada es un guiso que necesitas empezar ya el día anterior con el remojo de las "fabes". ¿Qué son las "fabes"? Pues una variedad de alubias, con Denominación de Origen, muy suaves y mantecosas. Después, el guiso también lo haremos a fuego lento, por lo que hay que contar unas dos horas de cocción más una hora de reposo para que acabe de asentarse. No solo ponemos a remojo la legumbre. La panceta curada también la dejamos en agua un par de horas. Una variedad muy apreciada gastronómicamente es la panceta de Soria. El chorizo y la morcilla acaban de completar la sinfonía de sabores de este contundente y delicioso plato. Si quieres hacer un plato más ligero con alubias, prueba esta sopa de verduras con alubias blancas o la sopa ligera de alubias y fideos . Otro guiso muy tradicional que seguro que te encantará son las alubias con almejas . También puedes probar otra versión de la fabada clásica . Consejos para una fabada asturiana perfecta Elige los mejores embutidos. Para esta receta solo empleamos chorizo fresco, morcilla y panceta curada. Asegúrate que te llevas un embutido de calidad porque es parte del éxito de la receta. Tuesta el azafrán. Antes de añadir el azafrán, si lo tuestas ligeramente dentro de un sobrecito hecho con papel de aluminio, conseguirás extraer mejor su aroma. Ponlo al fuego o bajo un mechero. Alubias. Si no tienes las auténticas "fabes" también te quedará bien con unas buenas alubias blancas. El agua de cocción. Utilizaremos para esta receta la misma agua donde se ha dejado la legumbre en reposo. Si hace falta más, se añade hasta que queden bien cubiertas. Luego, durante el guiso, se va añadiendo agua fría de vez en cuando. Y si utilizas agua mineral en lugar de la del grifo, mucho mejor.