De todos es sabido que el pescado a la plancha o a la parrilla es una manera saludable y deliciosa de disfrutarlo. Apenas suma calorías, es una opción muy ligera, está buenísima, y además podrás acompañarlo con guarniciones tan completas como estas espinacas crujientes con huevo y tomate, o estas verduras salteadas, marinadas con hierbas y limón.
Estamos en plena época de barbacoas, y el pescado a la brasa es una alternativa deliciosa a la carne. Lo más adecuado para cocinar un pescado a la parrilla es elegir piezas enteras, por ejemplo lubinas y doradas. Pero si no quieres perder el pescado en la rejilla, el truco definitivo es:
1. No desescames el pescado
Cuando vayas a comprar el pescado, avisa al pescadero de que quieres cocinarlo a la parrilla o a la brasa. Así no le quitará las escamas, que harán de capa protectora de la piel del pescado y evitarán que se adhiera a la rejilla. Untar el pescado con un poco de aceite también es una buena idea.
Si no tienes barbacoa y vas a cocinar el pescado a la plancha, pero siempre se te queda pegado, aquí van otros 2 trucos infalibles que harán que tu filete de pescado quede perfecto.
2. Calienta bien la plancha o la parrilla
Es fundamental al cocinar cualquier alimento calentar bien la plancha antes de agregarlo a la misma. Si calientas correctamente la sartén, y agregas un chorrito de oliva, se calentará de inmediato y entonces podrás añadir el pescado para cocinarlo un par de minutos por cada lado. De esta forma te quedará jugoso por dentro y tostadito por fuera. También es una opción poner un poquito de sal en la plancha antes de poner el pescado (en ese caso, no sales el pescado).
3. Pinta el pescado con aceite antes de cocinarlo
Uno de los mejores trucos para evitar que el pescado se pegue a la parrilla y que además le dará mucho más sabor, es pintarlo con un poco de aceite de oliva antes de cocinarlo. Si además sazonas el aceite con una pizca de sal y especias, y agregas algunas hierbas aromáticas, te quedará un pescado mucho más sabroso.
Del mismo modo, puedes preparar cualquier marinado para tu pescado, escurrirlo, y cocinarlo directamente sobre la sartén antiadherente bien caliente sin ningún riesgo de que se te quede pegado.
Y no te olvides: si tu plancha o tu parrilla han perdido parte del revestimiento antiadherente, indudablemente el pescado se te quedará pegado y además de desperdiciar gran parte del producto, su presentación en el plato no será la mejor.