Las cremas de calabaza son un plato muy socorrido que apetece especialmente en los meses de frío. Este es un plato sencillo, cierto, pero siempre se le puede dar un toque especial añadiendo algún elemento extra como son las brochetas de pulpo crujiente o algún otro tipo de guarnición como los puerros rebozados que también se colocan en la brocheta o simplemente unas pipas de calabaza. La clave para que funcione es que aporte un elemento crujiente que contraste con la suavidad de la crema . Puede que haya un ingrediente para hacer esta crema de calabaza que te extrañe y es que habitualmente no le solemos poner naranja. Sin embargo, te aseguramos que el contraste de sabores que aporta es una auténtica delicia. La crema de calabaza también queda especialmente rica con manzana así que si quieres, puedes cambiar la naranja por esta. El pulpo puedes comprarlo fresco o ya cocido . Como vamos a usarlo solo una o dos patas, nuestro consejo es que lo compres ya cocido, como después vamos a freírlo es una buena forma de ahorrar tiempo en la cocina sin que el resultado se vaya a ver afectado. Y si te gusta el pulpo en su versión más conocida, lánzate a preparar un pulpo a la gallega clásico . Consejos para tu crema de calabaza con pulpo crujiente Pelar y cortar la calabaza puede ser una tarea ardua para algunas personas. Si quieres acelerar el proceso, lávala y pínchala con un chuchillo tipo puntilla por toda partes. Cocínala durante unos minutos en el microondas . Luego podrás pelarla sin problemas porque solo una pequeña parte de la carne del exterior se habrá cocinado y estará lo suficientemente hecha como para que puedas cortar la cáscara sin problemas. También facilita la tarea cortar la calabaza en rodajas más pequeñas que puedas apoyar en plano sobre la tabla de cortar. Para freír el pulpo y los chips de puerro (y en realidad para freír cualquier cosa) lo ideal es utilizar siempre aceite de oliva virgen extra en lugar de otros aceites refinados. La fritura es mucho más saludable puesto que al calentarse, este aceite no libera tantas partículas nocivas para la salud como los refinados. ¿Cómo muelo los kikos? Si tienes un robot de cocina utilízalo , te va a facilitar mucho la tarea. Si no tienes, pon los kikos en una bolsa de plástico de las que se utilizan para congelar alimentos, ciérrala bien y usa el rodillo de cocina para aplastar los kikos. Con un poco de esfuerzo acabarán convertidos en polvo.