La brandada de bacalao es un plato típico de la zona del Mediterráneo que se prepara de forma muy sencilla . Solo necesitas cocer el bacalao junto con una patata en agua y leche y luego triturarlo con un ajo e ir añadiendo poco a poco el líquido de cocción. Se puede utilizar para untar en un poco de pan tostado o para rellenar unos pimientos o unos canelones o, como aquí, unos champiñones. Hay varias maneras de hacer este plato, la de aquí es más ligera y sencilla pero hay otras en las que se le pone nata y una buena cantidad de aceite de oliva. Añadas lo que añadas siempre hay que hacerlo poco a poco y sin dejar de remover para que se forme una especie de salsita que quede ligada pero nunca demasiado líquida. Tiene que tener una textura ligeramente firme para que la podamos usar para untar o rellenar otras preparaciones. Los champiñones que hemos elegido aquí combinan de maravilla con el sabor de la brandada y lo acompañan sin eclipsarlo. Hay que hornearlos una vez que los tenemos bien limpios y les hemos retirado el pie y después ponerles encima la brandada y un buen montoncito de queso rallado. Procura que esté rallado muy fino para que aguante en su sitio y que al derretirse no acabe cubriendo todo el champiñón porque queremos que se vea la base. Consejos: Limpia los champiñones con un paño húmedo para retirarles la tierra que puedan tener adherida a la superficie. Nunca los metas debajo del grifo ni mucho menos los sumerjas en agua para que queden relucientes. De esta manera absorben el líquido y luego tienen una textura menos agradable que si les hacemos una "limpieza en seco" con un pañito. Compra un queso de cuña de buena calidad y rállalo tú. Muchos preparados que se venden en bolsitas llevan de todo menos queso de verdad y aunque dan el pego por el sabor no son nada saludables además de que salen bastante caros.