El ceviche es un plato de origen peruano pero en los últimos años se ha puesto tan de moda que es fácil encontrarlo en multitud de restaurantes e incluso hacerlo en casa. Al igual que el tartar, es un plato que se sirve con pescado sin cocinar al fuego propiamente sino que simplemente se macera en un ácido que lo cuece ligeramente. Ya sabes que lo más probable es que haya comensales, si lo preparas para invitados, que se nieguen a probarlo alegando que está crudo. Puedes explicarles que no es así del todo, pero ten en cuenta que puede ser un tema polémico. Pero no hay de qué preocuparse. En una mesa con varios invitados de familias diferentes es normal encontrar distintas peculiaridades culinarias y si no quieren probarlo, ¡allá ellos! Más para ti. Y es que el ceviche es una auténtica delicia si se hace bien y ya te avisamos de que no es nada complicado. Lo más laborioso es cortar el pescado en daditos pequeños , pero el resto es coser y cantar. En este caso, el pescado que hemos elegido es el rape. Es un pescado que suele servir bastante en cenas y comidas navideñas y siempre da categoría a un menú. Puedes preparar el ceviche realmente con el pescado que prefieras pero es cierto que a la carne prieta del rape le van genial este tipo de maceraciones para ablandarla. Consejos: Hazte con un cuchillo de cocina muy bien afilado y el trabajo más difícil, el de cortar el pescado en daditos resultará mucho más rápido y más limpio. Hazte también con unas pinzas para extraer las espinas. Te resultará muy útil para este y otros platos. Sirve estas cucharas de ceviche de rape junto a otras de vieira con puré de guisante y perlas de aceite.