El formato carpaccio se ha puesto de moda. No solo con la carne o el pescado, también con las frutas y verduras. De hecho, en esta receta le hemos llamado carpaccio porque hemos cortado las láminas de piña muy finas. Si la piña es dulce y de calidad, no tienes por qué retirar la parte del corazón, concentra nutrientes como la fibra o la bromelina. Pero si no te gusta, retíraselo con un descorazonador o con el cuchillo. Para hacer bien ligero el plato le hemos añadido yogur desnatado, pero si quieres que quede más cremoso puedes utilizar otro tipo de yogur, como el griego o incluso añadir unas bolas de helado sobre la fruta. Con la piña puedes preparar excelentes postres como la tarta de chocolate y piña o un milhojas de piña, queso y zumo de lima . Y también es ideal para usar en platos salados como en el estofado de carrilleras de ternera con piña o acompañando a un solomillo a la provenzal . Consejos para un carpaccio de piña con yogur perfecto Yogur con menta. El contrapunto de sabor a tu carpaccio de piña se lo da la mezcla de yogur con menta picada finísima. Al elegirlo desnatado, te queda un postre de lo más ligero y saludable. Utensilios para cortar. Si consumes piña a menudo, te convendría comprarte algunos utensilios prácticos como un descorazonador o un cortador de piña, o un dos en uno que engloba estas dos acciones. Si no lo tienes, intenta cortar la piña lo más fina que puedas con un cuchillo bien afilado Contrapunto salado. Si quieres darle otro toque diferente, puedes machacar unos cacahuetes salados rebozados en miel y ponerlos sobre el yogur. Toque de licor. Si quieres volver a la tradición, échale a la piña un chorrito de un licor dulce tipo Cointreau. Antes era lo típico en las mesas festivas, incluso con la piña en almíbar.