Caldo de huesos con verduras y jamón, receta de sopa de la abuela con ingredientes de toda la vida

Con un sabor delicioso que te conquistará, este caldo de jamón casero es ideal para tomar solo, como consomé, o con un poco de pasta

Aurora Gonzalo
Aurora Gonzalo

Periodista especializada en gastronomía

Caldo de jamón

Caldo de jamón, calentito y reconfortante.

Cocina Fácil
4 personas
150 min
208 Cal

3

(31 votos)

Dieta:

Mediterránea

Temporada:

Invierno

Técnica:

Hervido

Tipo Plato:

Primeros platos y entrantes

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Sin lactosa
Sin huevo

Elaborar este caldo de jamón no tiene ninguna complicación. Únicamente hay un punto que debes tener en cuenta: antes de cocer los huesos con las verduritas es importante blanquearlos para que suelten todas las impurezas. Para, ello, déjalos en una olla con agua hirviendo unos segundos.

Luego, solo debes colocarlos en una olla con las verduras y déjalos hervir durante unas 2 horas. Acuérdate de no poner sal en el agua, el hueso de jamón ya contiene la suficiente.

Ingredientes paraCaldo de huesos con verduras y jamón, receta de sopa de la abuela con ingredientes de toda la vida

  • 1 hueso de ternera de la rodilla
  • 1 trozo de hueso de jamón
  • 1 cebolla
  • 1 patata pequeña
  • 1 zanahoria
  • 1 puerro
  • 1 apio
  • 1 nabo
  • 200 gramos de pasta

1. Cuece los huesos con las verduras

Blanquea los huesos unos segundos en agua hirviendo. Llena una cazuela con dos litros y medio de agua y añade los huesos limpios. Llévalo a ebullición, espúmalo y agrega las verduras limpias y troceadas.

2. Cuela el caldo

Deja cocer a fuego suave durante 2 horas. Transcurrido este tiempo, cuela el caldo y déjalo enfriar unas horas. Retira la capa de grasa que se haya formado y pon el caldo en una cazuela.

2. Cuela el caldo

3. Agrega la pasta

Cuando arranque a hervir, vierte los caracolillos y cuécelo hasta que la pasta esté lista. Sírvela inmediatamente.

El truco

Cuando el caldo esté frío, resérvalo en la nevera para que la grasa solidifique bien y se retire con facilidad.

Otras sopas que también te van a gustar son la auténtica sopa de pollo con fideos, la sopa juliana depurativa (ideal tras los excesos) o la sopa de pan y negrillas.

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