Los bizcochos de yogur son un clásico de la repostería al alcance de cualquiera. La presencia del lácteo en la masa hace que esté más esponjosa y además, podremos utilizar el envase como medida para el resto de ingredientes. Este detalle hará que el proceso sea mucho más rápido y sencillo ya que no tendremos que estar midiendo las cantidades una por una. Es precisamente por eso que esta receta resulta absolutamente perfecta para hacerla con niños. Ellos mismos podrán ir agregando los ingredientes sin ningún tipo de complicación y así sentirse partícipes del proceso. Es una actividad perfecta para esas tardes de sábado o domingo lluviosas o muy frías en las que se nos acaban las ideas. Y es que, los ingredientes que lleva este bizcocho de yogur y chocolate son tan comunes que seguro que los tienes en casa para hacerlo de manera improvisada. Quizá lo menos recurrente sean las almendras laminadas pero se puede prescindir de ellas o sustituirlas por cualquier otro fruto seco que sí esté en tu despensa. No es necesario filetearlas, bastará con trocearlas un poco y eso es algo que también pueden hacer los más peques de la casa. Al final de la receta te contamos cómo pueden hacerlo sin formar un desastre en la cocina. Consejos Para que los niños (y los adultos) puedan trocear cualquier tipo de fruto seco sin formar un desastre , mete el fruto seco elegido en una bolsa de congelación, ciérrala con un nudo y golpea con la mano del mortero, con un rodillo o con cualquier otro objeto contundente. Si sigues golpeando puedes incluso conseguir polvo pero lo interesante para esta receta es que queden trocitos de tamaño medio que se noten en la boca al masticar. ¿Tienes un bote de yogur grande en lugar de envases individuales ? Puedes utilizarlo perfectamente para hacer esta receta tomando como medida un vaso o un bol de tamaño pequeño tanto para añadir el yogur como el resto de ingredientes. Así tampoco tendrás que pesar ninguno de los elementos del bizcocho para hacerlo.