Este bizcocho glaseado de canela con pistachos, va un paso más allá del bizcocho de yogur clásico, porque puedes convertirlo en una fantástica tarta de la forma más fácil, solo tienes que verter por encima una sencilla glasa y espolvorearla con unos trozos de pistacho. El glaseado más básico es el que se obtiene mezclando azúcar glas con agua caliente o con leche, como en este bizcocho glaseado de canela con pistachos, hasta que se forme una pasta fluida de color blanco. También puedes sustituir el líquido por una clara de huevo y unas gotas de zumo de limón, entonces se llama glasa real y puedes hacerla más o menos espesa aumentando o reduciendo la cantidad de azúcar glas de la receta, hasta que tenga la consistencia deseada. Tanto la glasa real como la básica pueden aromatizarse, colorearse o ambas cosas a la vez, todo depende de tus gustos. A la hora de decorar el postre también hay alternativas, ¿prefieres cubrir toda la superficie del bizcocho con el glaseado? Entonces haz más cantidad, viértelo en el centro del bizcocho y extiéndelo con una espátula hacia los bordes. Si te ha gustado nuestro bizcocho glaseado, te encantará este bizcocho de plátano y granada o el de chocolate glaseado con frambuesas , ambos decorados con la clásica glasa blanca. Con un toque cítrico puedes preparar el bizcocho de frutas rojas con glaseado de limón o el bizcocho de naranja glaseado . La masa perfecta para tu bizcocho glaseado de canela con pistachos –En el mercado hay mucha variedad de harinas para repostería, así que para evitar sorpresas lee bien la receta antes y asegúrate de cuál es la que necesitas. Si no quieres complicarte la vida puedes optar por una harina específica para bizcochos, que lleva incorporado el impulsor químico y es muy cómoda de utilizar. Pero si prefieres controlar la cantidad exacta de levadura que vas añadir y quienes lo van a tomar no tienen intolerancia al gluten, mejor decídete por una harina de trigo normal. –Para que tu bizcocho glaseado de canela con pistachos te quede más ligero y esponjoso, mezcla inmediatamente la harina y la levadura tamizadas con la preparación de huevo. En este momento ya no hay que batir la masa con las varillas, sino removerla con suavidad y lo menos posible. Agrega la harina poco a poco mientras mezclas con una espátula moviéndola de arriba abajo para deshacer todos los grumos. –Cuando incorpores la mezcla de canela y azúcar moreno a la masa de tu bizcocho, añade también 1 cucharada de cacao puro en polvo y otra de pistachos picaditos. –Divide el relleno de canela y azúcar en dos partes iguales y espolvorea la mitad dentro del molde con la mitad de la masa, cubre con la masa restante y reparte por encima la mezcla de azúcar y canela que queda. Con el calor del horno, el azúcar se derretirá y la superficie del bizcocho quedará doradita y crujiente. En este caso puedes ahorrarte la glasa, bastará con adornarlo con una mezcla de frutos secos variados.