Berenjenas rebozadas rellenas de roquefort

Sencillo pero ¿a que no se te había ocurrido nunca hacer unos libritos de berenjena rellenos de queso roquefort? Hay que dejar reposar la berenjena para quitarle el amargor.

Adrián Geralnik
Adrián Geralnik
Cocinero y fotógrafo

Berenjenas rellenas
4 personas
20 min

5

(5 votos)

Dieta:

Mediterránea

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Fritura

Tipo Plato:

Aperitivos y tapas

Primeros platos y entrantes

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Las berenjenas son una hortaliza muy versátil en la cocina. Pueden ser las protagonistas de una receta, por ejemplo en el caso de las berenjenas rellenas, o un acompañamiento perfecto, por ejemplo de una ratatouille, ideal para servir junto a una carne o a un pescado. Se pueden preparar de muchas maneras, al horno, fritas, en tempura, a la plancha, al vapor, salteadas...

Pero... ¿y si las usamos para preparar unos deliciosos emparedados? Aquí las hemos rellenado con queso roquefort, y el truco para lograr que el relleno no se salga durante la fritura es no cortar del todo las 2 rodajas de berenjena (es decir, dejarlas unidas por uno de los lados) y luego rebozarlas muy bien en harina y huevo batido. Para que los laterales de los emparedados de berenjena queden bien cubiertos por el rebozado, hazlas rodar, en vertical, sobre la harina. Y luego sumérgelas en el huevo para que las cubra bien y forme una película que no deje salir el relleno.

Aunque las berenjenas son una hortaliza muy poco calórica (25 calorías por 100 gramos), la verdad es que por su estructura interna, que tiene mucho, se convierten en una esponja que absorbe gran cantidad de aceite al freírlas. Al pasarlas por harina y huevo, estamos reduciendo en parte ese efecto esponja, pero otro truco que funciona muy bien es dejarlas en remojo de agua con sal un rato antes de cocinarlas (con media hora será suficiente), y así a la vez les quitarás el posible amargor que tengan. Luego tendrás que dejarlas escurrir en un colador, apretarlas un poco con las manos para eliminar el exceso de agua e incluso secarlas con un poco con papel de cocina.

Ingredientes paraBerenjenas rebozadas rellenas de roquefort

  • 2 Berenjenas
  • 100 gramos de Queso Roquefort
  • Harina de trigo
  • 1 Huevo
  • Aceite De Oliva
  • Sal
  • Pimienta Negra

1. Corta las berenjenas

Divide las berenjenas a libritos finos: con un chuchillo bien afilado, corta una rodaja sin llegar al final y corta la siguiente llegando al final y haciendo un librito.

1. Corta las berenjenas

2. Quítales el amargor

Salpimienta las berenjenas y déjalas en un escurridor 5 minutos. Así evitarás su punto amargo. Si además quieres evitar que absorban mucho aceite durante la fritura, déjalas en remojo de agua con sal durante 30 minutos. Luego, escúrrelas muy bien apretándolas un poco con la mano, para eliminar el exceso de agua.

2. Quítales el amargor

3. Rellena los libritos

Rellena los libritos con un trozo de queso roquefort, intentando que no sobresalga por los laterales para poder rebozar los emparedados más fácilmente.

4. Bate los huevos

Bate los huevos en un plato hondo y salpimiéntalos. Pon la harina en un plato llano y reboza los libritos primero en harina (por los dos lados, y hazlos rodar también sobre la harina para cubrir bien todos los laterales) y luego en huevo batido.

4. Bate los huevos

5. Fríe las berenjenas

Fríe las berenjenas rellenas en una sartén con aceite caliente y, una vez doradas, déjalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Sírvelas bien calientes.

Otras ideas para las berenjenas rebozadas:

  • Puedes utilizar otras variedades de quesos si el roquefort te parece demasiado fuerte de sabor. Con brie también quedarían perfectas, o con cheddar, emmental e incluso un queso manchego. Es importante que el queso mantenga la forma circular de las berenjenas, para que no sobresalga por los laterales y sea más fácil rebozarlas.
  • ¿Y si conviertes estos emparedados de berenjena en un mixto personalizado? Rellénalas con jamón cocido o curado y queso, verás qué ricas quedan.
  • El rebozado puede tener un tercer paso, que es pasar los emparedados también por pan rallado. Es decir, primero harina de trigo, luego huevo batido y finalmente pan rallado. Les darás un toque crujiente y, si hay niños en casa, seguro que les encantan. Hay panes rallados más gruesos y más finos, elige el que más te guste.
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