¿Quieres preparar un arroz de pescado que conquiste el paladar de tus invitados por su delicioso sabor? No te pierdas el arroz a banda con azafrán que te proponemos hoy. Plato originario de la costa de Alicante, el arroz a banda debe su nombre a la forma en la que se comía antiguamente: por un lado, el pescado y por otro, el arroz. Hoy en día, y aunque existen muchas versiones, se suelen servir juntos. En nuestra versión lo presentamos con mejillones , trocitos de sepia , langostinos y rape . Y en el momento de servir, lo acompañamos con unas alcachofas fritas que le aportarán un irresistible toque crujiente. Como en casi todos los arroces marineros, el éxito de este plato está en el fumet . Prepáralo con espinas, cangrejos, pescado de roca… Cuando ya lo tengas listo, pásalo por un colador y machaca los restos con la ayuda de un mazo para extraer todos sus jugos. Y para potenciar el sabor a mar, incorpora el jugo de la cocción de los mejillones. Te quedará un arroz a banda exquisito. Un consejo: procura tener un cazo con el fumet de pescado en el fuego, para que esté caliente. Así si el arroz queda seco durante la cocción y necesitas más caldo, ya lo tendrás calentito. ¿Te han entrado ganas de cocinar más platos de arroz? No te pierdas estas ideas. Puedes preparar un arroz negro con sepia y pimiento , un arroz caldoso con calamares y berberechos o una paella tradicional de marisco . Consejos y trucos para el arroz a banda con azafrán Antes de empezar a cocer los mejillones , ponlos en remojo en un bol con agua salada para eliminar los restos de arena que puedan contener. Luego, cepilla las conchas y retira las barbas o viso con la ayuda de unas tijeras. Pásalos bajo el agua del grifo y ya los puedes cocinar. En el momento de agregar el azafrán , en lugar de echarlo entero, pícalo en el mortero o pártelo con tus dedos. Así se esparcirá mejor entre los otros ingredientes. Para realizar este arroz a banda usa siempre el tipo bomba . Te quedará suelto y gustará a todos por su sabor y por su consistencia perfecta. Una vez tengas el arroz fuera del fuego, tápalo con un paño de cocina o papel de aluminio y déjalo reposar durante unos minutos para que acabe de absorber todo el caldo.