Los andrajos son un plato típico de Andalucía, en concreto de Úbeda, pero es cierto que hay versiones propias de Granada, Jaén y Almería y que también se cocina en algunas zonas de Murcia y Albacete. Los andrajos con una preparación hecha a base de una sencilla masa de harina de trigo que se corta en cuadrados y se cocina en el propio guiso que, en este caso también lleva carne de conejo , patatas y pimiento choricero. Otras versiones de los andrajos se preparan con bacalao, sobre todo durante la Semana Santa y en Cuaresma, cuando tradicionalmente se evitaba el consumo de carne. También hay versiones tradicionales con carne de liebre. Y es que se trata de un plato de origen humilde. Su nombre, de hecho, se debe, a la forma de la pasta o tortas, que pueden recordar a jirones de ropa cuando al cocinarse se deshacen ligeramente. En cada región, y casi en cada casa hay una versión propia (como pasa con otras elaboraciones) de los andrajos. Varían algunos de sus ingredientes , hay algunas en las que se cambia el pimiento choricero por tomate triturado o se añaden hierbas como el laurel o la hierbabuena. Es un plato que se consume típicamente en invierno como buen guiso calórico que está destinado a calentarnos en los días más fríos. No te lo pienses y prepáralo en una buena cantidad para tenerlo a mano en esos momentos en los que el cuerpo te pida un guiso reconstituyente. Consejos: Cuando amases los andrajos, procura no agregar demasiada harina ya que el caldo podría quedar excesivamente espeso cuando los cuezas y se deshagan ligeramente en él. En este caso no es necesario cocer la verdura y la carne en un caldo previamente preparado porque los propios ingredientes ya son lo suficientemente potentes. Sin embargo, si ya tienes uno de verdura hecho no te lo pienses y agrégalo al preparado. Siempre aportará un plus al guiso.