Las recetas de albóndigas son un clásico de nuestra gastronomía, pero igual nunca habías cocinado unas albóndigas de salmón como las que hemos preparado en Cocina Fácil. Llevan un toque de cebollino y sésamo y quedan riquísimas. El salmón es muy versátil en la cocina, tanto puedes presentarlo tanto en un pastel como en una quiche o en hojaldre . Según te guste encontrar la textura de las albóndigas , puedes picar el salmón en la picadora o cortarlo a trocitos pequeños con un cuchillo afilado para que se encuentre mejor la carne de este suave pescado azul. En esta receta hemos usado guisantes y espárragos en conserva para que la puedas hacer todo el año, pero en temporada y con tiempo, lo ideal es desgranar los guisantes frescos y disfrutar del exquisito sabor también de los espárragos trigueros para unir a la salsa. Consejos para unas albóndigas con salmón perfectas Las albóndigas de salmón tienen que saber a salmón, no hay que escatimar con la cantidad de pescado ni excederse en la salsa para que oculte sabores, tiene que acompañar. En lugar de pan rallado puedes utilizar miga de pan remojada en leche, quedarán más suaves aún. Con el pan rallado quedarán más duritas y compactas. Para que no se te peguen las albóndigas a las manos, ve humedeciéndolas de vez en cuando, mientras haces las bolas. Y antes de freírlas, pásalas ligeramente por harina. Solo cuando hemos preparado el caldo y la salsa empieza a ligar, se añaden las albóndigas durante unos 10 minutos. Los guisantes y los espárragos se añaden al final, al ser de conserva, así no compiten en sabor.