Si quieres incorporar más pescado a tus menús diarios y estás buscando ideas apetitosas para “camuflarlo” y que tu familia, especialmente los niños, se lo coman sin rechistar, aquí tienes una sugerencia que se ajusta perfectamente a tus necesidades: unas albóndigas de pescado con salsa de cebolla y una guarnición de boniato y calabaza . Crujientes por fuera y muy suaves y jugosas por dentro, estas albóndigas están tan ricas que te conquistarán. Te aconsejamos que hagas más de la cuenta porque, a la que lleguen a la mesa, van a desaparecer. Elaboradas simplemente con pescadilla , pan remojado en leche , huevo , sal y pimienta, estas albóndigas son facilísimas de realizar. Una vez tengas la masa lista, déjala unos minutos en la nevera para que repose y, luego, empieza a realizar las bolitas. Pásalas por harina, huevo batido y pan rallado y… a freír. Si esta receta te ha gustado, prueba también las albóndigas de salmón en salsa verde , las albóndigas de cazón en salsa verde con espárragos y huevo duro o las albóndigas de caballa en salsa . Todas están exquisitas. Consejos y variantes para las albóndigas de pescado Puedes enriquecer estas albóndigas agregando unas gambas troceadas. Fríe las albóndigas en tandas para que la temperatura del aceite no se baje. Y, luego, ponlas sobre papel absorbente de cocina para que suelten todo el aceite. Para que queden más crujientes, añade a la masa unas semillas de sésamo o granillo de almendra . Es suficiente con 1 cucharada. Sustituye la salsa de cebolla por una de tomate .