El sabor del Pastel de piña en almíbar nos llevará a tiempos pasados y lleno de buenos recuerdos. Se pierde en la noche de los tiempos cuando las madres sacaban la lata como si fuera uno de los regalos navideños y la ponían sobre las mesas. Hace muchos años era difícil ver piñas naturales en los mercados y en las cestas de empresa siempre aparecía junto a las tabletas de turrón la archifamosa conserva. La elaboración que te proponemos es muy sencilla y estarás muy poco tiempo en la cocina. Sencilla, pero a la vez llena de un dulzor afrutado ideal para esta época de comidas de grandes digestiones. Solo necesitarás 5 ingredientes para tener un postre casero con el que deleitarás a todos tus invitados. Ten en cuenta que para saborearlo habrá que enfriarlo durante un día en la nevera para que la gelatina se cuaje perfectamente. Sigue el paso a paso en el vídeo del Canal Cucharón de palo Granada . Tarta sin horno de piña en almíbar Para 4 personas Ingredientes 1 lata gran de piña en almíbar o al natural 1 sobre de gelatina 1/2 l de nata líquida Caramelo líquido 1 paquete de bizcochos sobaos Paso a paso Por el caramelo para la base Cubre la base del molde con una generosa capa de caramelo liquido y repártela de forma regular. Escurre la piña Reserva el almíbar, saca las rodajas repartiéndolas por encima del caramelo líquido e intentando que queden los menores huecos posibles. Corta los sobaos Serán parte de la base del pastel y como lo ideal es que no sea muy gruesa, corta por la mitad las porciones de bizcocho y repártelas en el molde tapando la piña. Reserva. Haz la gelatina En un cazo y con un fuego moderado (sin hervir) vierte el almíbar de la lata de piña junto con el sobre de gelatina. Mueve hasta que estén integrados. Añade la nata líquida Quita el cazo de la gelatina del fuego y vierte el medio litro de nata líquida removiéndolo todo. Vierte encima de los sobaos Echa la mezcla encima de los sobaos en el molde del pastel hasta cubrir el recipiente. Enfría en la nevera Mete el molde en la nevera y deja que se enfríe durante 24 horas antes de servirlo. Desmolda y sirve Para desmoldar usa un cuchillo y repasa los bordes del molde. Tápalo con una bandeja y dale la vuelta. Tendrás tu pastel preparado para comer.