Una de las recetas más aplaudidas de la repostería portuguesa son los pastelitos de Belém que, además, son muy fáciles de hacer. Estos suculentos pastelitos son un postre tradicional que no puedes ni debes dejar de probar si visitas el país vecino, en concreto la ciudad de Lisboa. De hecho, Belém es el nombre de un barrio de la ciudad donde nacieron estos dulces. En su origen fueron dulces de convento , pues se preparaban según una receta secreta de los monjes del Monasterio de los Jerónimos. La curiosidad del nombre de este dulce, que en Portugal llaman pastéis de nata , consiste en que, en realidad no van rellenos de nata, sino de crema pastelera . ¿Por qué les llaman así, entonces? Pues porque en portugués, nata significa crema . ¡Así de fácil! ¿Vamos con la receta? Sí, aquí tienes la receta secreta... Pasteles de Bélem Para 8 personas Ingredientes 1 lámina de hojaldre refrigerado rectangular 500 mililitros de leche 6 yemas de huevo 200 gramos de azúcar 50 gramos de harina 1 limón 1 rama de canela Mantequilla derretida para los moldes Hojas de menta para decorar Paso a paso Infusiona la leche Vierte 350 mililitros de leche a calentar en un cazo, agrega la rama de canela partida por la mitad y un par de trozos de piel de limón (sin la parte blanca). Deja infusionar la leche a fuego suave durante 15 minutos, más o menos. Retira el cazo del fuego y reserva. Prepara los moldes Unta con la mantequilla derretida unos moldes aptos para horno, para después poder desmoldar con facilidad los pastelitos. Si lo prefieres, también puedes usar un molde para magdalenas. Trabaja el hojaldre Desenrolla el hojaldre y vuelve a enrollarlo sin el papel de horno que incorpora el paquete. Corta porciones de unos 3 centímetros de ancho, dales forma de bola entre las palmas de las manos y luego cubre con esta masa los moldes, estirando la masa desde el fondo hasta los laterales, dejando un poco más de grosor en las paredes. Deja que reposen unos 20 minutos. Termina la crema Mezcla la harina y el azúcar en un cuenco amplio y vierte encima la leche fría restante. Mezcla bien hasta que desaparezcan los grumos. Añade también la leche infusionada, pasándola por un colador para eliminar la canela y la piel de limón. Remueve y pasa la mezcla al cazo, ponla a calentar a fuego suave hasta que dé un hervor. Apaga el fuego. Mezcla con las yemas Bate ligeramente las yemas de huevo con varillas manuales y luego ve añadiendo la mezcla anterior, sin dejar de batir con las varillas. Rellena las bases Reparte la crema entre los moldes forrados con hojaldre, sin llegar a llenarlos del todo. Ponlos en una bandeja de horno. Hornea los pastelitos Introduce la bandeja de horno en el horno precalentado, en la parte baja para que el hojaldre se cueza bien y los pastelitos no se quemen por la superficie. Hornea a 220º, 15-20 minutos. Sirve fríos o templados, decorados con unas hojitas de menta. Trucos para personalizar tus pasteles de Bélem: Aromatiza la leche con vainilla y piel de naranja , en lugar de canela y limón. Tendrás una crema pastelera con un sabor distinto pero también delicioso. Justo antes de servir, puedes espolvorear los pastéis de belém con un poco de azúcar glas .